VILLEL DE MESA
Apuntes en los 750 años del Corpus
Este domingo, 22 de junio, la iglesia en España y buena parte de la cristiandad celebra el día del Corpus Christi, la solemnidad del Santísimo Cuerpo y Sangre del Señor. Es una hermosa y popular fiesta de la exaltación de la eucaristía. Es asimismo la jornada nacional de la caridad. Eucaristía y caridad son dos realidades inseparables.
La fiesta del Corpus, cuya fecha original es el jueves tras la solemnidad de la Santísima Trinidad, realza el sentido y el valor del culto eucarístico no solo dentro de la misa, sino también fuera de ella, con especial esplendor en la procesión eucarística y en la adoración al Santísimo Sacramento. el Corpus quiere, de este modo, servir y poner de relieve la fe reveladora y proclamada de la católica en la presencia real y permanente del Señor en la eucaristía, quien siempre, además, nos aguarda en el sagrario.
La Iglesia católica en España mantiene extraordinarias expresiones de historia, piedad, belleza y solemnidad en torno al Corpus, alguna de ellas tan conocidas y multitudinarias como el Corpus de Toledo, Sevilla, Granada, Berga, León, Puenteareas, Cádiz, Córdoba, La Oratava, Camuñas, Valverde de los Arroyos..
Génesis
Fue la diócesis de Lieja (Bélgica) la primera en celebrar el Corpus, desde el año 1246 a consecuencia de las visiones y revelaciones de la beata Juliana de Mont-Cornillon. Fue el obispo de la citada diócesis belga, Robert de Tourotte, quien aprobó la fiesta, siguiendo los ruegos del sacerdote Jacques Pantaleón y de las laicas Eva de San Martín e Isabelle de Huy. El cardenal Mugues de Sainte-Cher la estableció en la colegiata de San Martin de Lieja en 1251.
En 1264 el Papa Urbano IV -que había sido antes arcediano de la basílica de Lieja y promotor de la celebración del Corpus- extendió la fiesta al resto de la Iglesia universal, mediante la vuela Transiturus, fechada el 8 de septiembre de 1264. Va a hacer, pues, 750 años. antes, el mismo Papa, había encargado preparar el oficio litúrgico de esta fiesta, uno de cuyos autores es Santo Tomás de Aquino. Desde 1265, fiesta del Corpus Christi se celebra en toda la Iglesia.
Fueron los monjes cistercienses los mayores impulsores de esta devoción y culto a la eucaristía. Una serie de hechos prodigiosos como los famosos casos de las formas incorruptas de San Juan de las Abadesas (Gerona), de los corporales de Daroca (Zaragoza) o los de Bolsena, en el Lazio italiano, y que se conservan en la catedral de Oviedo -"el más hermoso monumento de la arquitectura policroma"-, fueron también decisivos en la instauración y desarrollo de esta festividad. Precisamente también ahora se cumplen 775 años del milagro de los sagrados corporales de Daroca.
La tradición de la procesión del Corpus es posterior. Fue el Concilio de Trento (segunda mitad del siglo XVI) el que la institucionalizó en la fiesta del Corpus Christi, se llevase públicamente en procesión por las calles y plazas.
La primera procesión del Corpus presidida por un Papa, Nicolás V, tuvo lugar en Romo en 1447.
Singularidades
Barcelona, Gerona, Vic, Valencia, Calahorra fueron las primera ciudades de España en sumarse a la celebración del Corpus. Con todo, ya antes, en otros lugares de nuestro país, había hermosísimas manifestaciones de piedad eucarística. Así, la exposición permanente del Santísimo en la catedral de Lugo data del siglo VI. Del sigloXI son los hechos prodigiosos, ambos en Cataluña, de la Santa Duda de Ivorra o de las formas incorruptas de Sant Cugat del Valles.
En España, junto a las procesiones y la gran ornamentación en torno a la solemnidad, nacieron los Autos Sacramentales, elevados en dignificación y categoría literaria, en la Edad de Oro de la Literatura Española, por Lope de Vega o Calderón de la Barca autor, que mas se celebraba"El gran teatro del mundo". Se presentaban en las iglesias, en las plazas y frente a los palacios en las jornadas previas a la fiesta del Corpus. El final de la escenificación y adoración eucarística
(Ecclesia, Año LXXIV, número 3732, 21 junio 2014 pág. 910, Jesús de las Heras Muela, Director de Ecclesia).
Apuntes en los 750 años del Corpus
Este domingo, 22 de junio, la iglesia en España y buena parte de la cristiandad celebra el día del Corpus Christi, la solemnidad del Santísimo Cuerpo y Sangre del Señor. Es una hermosa y popular fiesta de la exaltación de la eucaristía. Es asimismo la jornada nacional de la caridad. Eucaristía y caridad son dos realidades inseparables.
La fiesta del Corpus, cuya fecha original es el jueves tras la solemnidad de la Santísima Trinidad, realza el sentido y el valor del culto eucarístico no solo dentro de la misa, sino también fuera de ella, con especial esplendor en la procesión eucarística y en la adoración al Santísimo Sacramento. el Corpus quiere, de este modo, servir y poner de relieve la fe reveladora y proclamada de la católica en la presencia real y permanente del Señor en la eucaristía, quien siempre, además, nos aguarda en el sagrario.
La Iglesia católica en España mantiene extraordinarias expresiones de historia, piedad, belleza y solemnidad en torno al Corpus, alguna de ellas tan conocidas y multitudinarias como el Corpus de Toledo, Sevilla, Granada, Berga, León, Puenteareas, Cádiz, Córdoba, La Oratava, Camuñas, Valverde de los Arroyos..
Génesis
Fue la diócesis de Lieja (Bélgica) la primera en celebrar el Corpus, desde el año 1246 a consecuencia de las visiones y revelaciones de la beata Juliana de Mont-Cornillon. Fue el obispo de la citada diócesis belga, Robert de Tourotte, quien aprobó la fiesta, siguiendo los ruegos del sacerdote Jacques Pantaleón y de las laicas Eva de San Martín e Isabelle de Huy. El cardenal Mugues de Sainte-Cher la estableció en la colegiata de San Martin de Lieja en 1251.
En 1264 el Papa Urbano IV -que había sido antes arcediano de la basílica de Lieja y promotor de la celebración del Corpus- extendió la fiesta al resto de la Iglesia universal, mediante la vuela Transiturus, fechada el 8 de septiembre de 1264. Va a hacer, pues, 750 años. antes, el mismo Papa, había encargado preparar el oficio litúrgico de esta fiesta, uno de cuyos autores es Santo Tomás de Aquino. Desde 1265, fiesta del Corpus Christi se celebra en toda la Iglesia.
Fueron los monjes cistercienses los mayores impulsores de esta devoción y culto a la eucaristía. Una serie de hechos prodigiosos como los famosos casos de las formas incorruptas de San Juan de las Abadesas (Gerona), de los corporales de Daroca (Zaragoza) o los de Bolsena, en el Lazio italiano, y que se conservan en la catedral de Oviedo -"el más hermoso monumento de la arquitectura policroma"-, fueron también decisivos en la instauración y desarrollo de esta festividad. Precisamente también ahora se cumplen 775 años del milagro de los sagrados corporales de Daroca.
La tradición de la procesión del Corpus es posterior. Fue el Concilio de Trento (segunda mitad del siglo XVI) el que la institucionalizó en la fiesta del Corpus Christi, se llevase públicamente en procesión por las calles y plazas.
La primera procesión del Corpus presidida por un Papa, Nicolás V, tuvo lugar en Romo en 1447.
Singularidades
Barcelona, Gerona, Vic, Valencia, Calahorra fueron las primera ciudades de España en sumarse a la celebración del Corpus. Con todo, ya antes, en otros lugares de nuestro país, había hermosísimas manifestaciones de piedad eucarística. Así, la exposición permanente del Santísimo en la catedral de Lugo data del siglo VI. Del sigloXI son los hechos prodigiosos, ambos en Cataluña, de la Santa Duda de Ivorra o de las formas incorruptas de Sant Cugat del Valles.
En España, junto a las procesiones y la gran ornamentación en torno a la solemnidad, nacieron los Autos Sacramentales, elevados en dignificación y categoría literaria, en la Edad de Oro de la Literatura Española, por Lope de Vega o Calderón de la Barca autor, que mas se celebraba"El gran teatro del mundo". Se presentaban en las iglesias, en las plazas y frente a los palacios en las jornadas previas a la fiesta del Corpus. El final de la escenificación y adoración eucarística
(Ecclesia, Año LXXIV, número 3732, 21 junio 2014 pág. 910, Jesús de las Heras Muela, Director de Ecclesia).
