VILLEL DE MESA
HOMENAJE AL SANTO LABRADOR SAN ISIDRO ENTRE CÁNTICOS
SE DESPLAZARON PERSONAS DE GUADALAJARA MADRID Y BARCELONA PARA ACUDIR A LA FIESTA.
Un día radiante, con unas vistas revestidas con los mejores colores en la vega y de sus montañas, el párroco Fernando Rojo bendijo los campos desde la explanada de la ermita. Caánticos y oraciones entonaron los feligreses en compañía de los visitantes de Madrid, Guadalajara y Barcelona que llegaron para unirse a la fiesta.
Por la mañana día 15 de Mayo, se congregaron en la iglesia para asistir a la eucaristía. Los cánticos estuvieron a cargo de la coral parroquial.
Terminados los actos litúrgicos, se sirvieron los dulces típicos, en la explanada de la ermita. De comentarios y peticiones al Santo no le faltaron como fueron buenas cosechas, que si el tiempo acompaña será un buen año en este valle.
El día transcurrió con el mejor ambiente familiar, con la mirada puesta en el volante de la nueva máquina agrícola y en el recuerdo de la yunta de caballerías y sus aperos, que junto con la hoz y zoqueta se guardan en el museo histórico.
HOMENAJE AL SANTO LABRADOR SAN ISIDRO ENTRE CÁNTICOS
SE DESPLAZARON PERSONAS DE GUADALAJARA MADRID Y BARCELONA PARA ACUDIR A LA FIESTA.
Un día radiante, con unas vistas revestidas con los mejores colores en la vega y de sus montañas, el párroco Fernando Rojo bendijo los campos desde la explanada de la ermita. Caánticos y oraciones entonaron los feligreses en compañía de los visitantes de Madrid, Guadalajara y Barcelona que llegaron para unirse a la fiesta.
Por la mañana día 15 de Mayo, se congregaron en la iglesia para asistir a la eucaristía. Los cánticos estuvieron a cargo de la coral parroquial.
Terminados los actos litúrgicos, se sirvieron los dulces típicos, en la explanada de la ermita. De comentarios y peticiones al Santo no le faltaron como fueron buenas cosechas, que si el tiempo acompaña será un buen año en este valle.
El día transcurrió con el mejor ambiente familiar, con la mirada puesta en el volante de la nueva máquina agrícola y en el recuerdo de la yunta de caballerías y sus aperos, que junto con la hoz y zoqueta se guardan en el museo histórico.