VILLEL DE MESA
EL VALLE DEL MESA CONMEMORA LA FESTIVIDAD DE LOS FIELES DIFUNTOS.
LOS CEMENTERIOS SE LLENARON DE FAMILIARES DE LOS FALLECIDOS.
Los días 1 y 2 de noviembre, los cementerios de nuestro valle fueron visitados por todos aquellos que tienen familiares y amigos descansando allí eternamente, depositando flores en sus lápidas y elevando oraciones por todos los difuntos. Días después, el mas anciano de Villel de Mesa, antonio Colás Gonzalo, fallecía rodeado de sus familiares y amigos antes de cumplir los 100 años.
El primer fin de semana de noviembre coincidió con la festividad de todos los Santos, que es la conmemoración litúrgica de todos los files difuntos, que este año, de una forma especial coincidió en domingo. Unas fechas muy entrañables en las que se visitan los cementerios en nuestros pueblos del valle del Mesa.
Nuestra tradición ha conservado a lo largo de los siglos, que durante estos días se les tenga en un recuerdo muy especial a todos nuestros difuntos, realizando las visitas a los cementerios y ante la tumba mostrarles una vez más nuestro dolor y al mismo tiempo el agradecimiento por cuantos valores nos dejaron, bien sean nuestros padres, abuelos o todos aquellos conocidos fallecidos en nuestros pueblos.
En cada lápida encontramos la inscripción de los nombres de las personas que allí descansan en paz, que a lo largo del recorrido por todo el cementerio se hace presente y viva la historia de cada uno de nuestros difuntos, de tal forma que nunca estamos solos. Cuando somos niños nuestros padres y abuelos nos acompñan y ahora los llevamos dentro de nuestro corazón y presentes en nuestros pensamientos.
En el cementerio de la capital del valle es emocionate constatar como, con un intervalo de casi 1.500 años, los habitantes de Villel eligieron este sitio, que mira más a la vega y al río que al pueblo, como lugar que deseaban para el descanso de sus restos mortales, según nos comenta nuestro historiador Manuel Zafra Aragón en la página número 8 de Cosas de Villel.
Los cipreses del cementerio siguen creciendo, formando la escalera mirando al cielo por donde todos vamos subiendo. Las estrellas del cielo del valle del Mesa son nuestros centinelas que nos iluminan en todos aquellos pasos que vamos dejando marcados durante nuestra vida. Será nuestro cementerio -la casa de todos-, que bajo el mismo suelo todos descansaremos.
Un distinto ambiente reina en nuestros pueblos durante estas fechas, tan familiares y entrañables, acompañado por el silencio otoñal, cuando las hojas de los árboles van cayendo, la brisa de las mañanas van dejando sus escarchas y las lluvias van empapando la tierra. Un mes de noviembre que va dejando el calendario sin días del año 2008, como si nos fuera abriendo la puerta del último mes de diciembre.
Con nuestro mayor recuerdo, que todos nuestros fieles difuntos descansen en paz por la misericordia de Dios.
FALLECE EL MÁS ANCIANO.
Después de una larga vida, nuestro amigo y vecino Antonio Colás falleció el día 4 de Noviembre, en fechas en las que habíamos dejado de conmemorar la festividad de todos los difuntos. Ya cerca de cumplir 100 años, Antonio deja a todos los vecinos el buen recuerdo, a sus familiares, sobrinos y en especial a Josefina, quien le ha atendido hasta el último momento.
Al terminar de escribir la crónica de nuestros cementerios, nos ha llegado la triste noticia, y hacemos llegar a sus familiares nuestro más sentido pésame.
Crónica en el Diario de Nueva Alcaría, viernes 07/11/2008, página 25.
EL VALLE DEL MESA CONMEMORA LA FESTIVIDAD DE LOS FIELES DIFUNTOS.
LOS CEMENTERIOS SE LLENARON DE FAMILIARES DE LOS FALLECIDOS.
Los días 1 y 2 de noviembre, los cementerios de nuestro valle fueron visitados por todos aquellos que tienen familiares y amigos descansando allí eternamente, depositando flores en sus lápidas y elevando oraciones por todos los difuntos. Días después, el mas anciano de Villel de Mesa, antonio Colás Gonzalo, fallecía rodeado de sus familiares y amigos antes de cumplir los 100 años.
El primer fin de semana de noviembre coincidió con la festividad de todos los Santos, que es la conmemoración litúrgica de todos los files difuntos, que este año, de una forma especial coincidió en domingo. Unas fechas muy entrañables en las que se visitan los cementerios en nuestros pueblos del valle del Mesa.
Nuestra tradición ha conservado a lo largo de los siglos, que durante estos días se les tenga en un recuerdo muy especial a todos nuestros difuntos, realizando las visitas a los cementerios y ante la tumba mostrarles una vez más nuestro dolor y al mismo tiempo el agradecimiento por cuantos valores nos dejaron, bien sean nuestros padres, abuelos o todos aquellos conocidos fallecidos en nuestros pueblos.
En cada lápida encontramos la inscripción de los nombres de las personas que allí descansan en paz, que a lo largo del recorrido por todo el cementerio se hace presente y viva la historia de cada uno de nuestros difuntos, de tal forma que nunca estamos solos. Cuando somos niños nuestros padres y abuelos nos acompñan y ahora los llevamos dentro de nuestro corazón y presentes en nuestros pensamientos.
En el cementerio de la capital del valle es emocionate constatar como, con un intervalo de casi 1.500 años, los habitantes de Villel eligieron este sitio, que mira más a la vega y al río que al pueblo, como lugar que deseaban para el descanso de sus restos mortales, según nos comenta nuestro historiador Manuel Zafra Aragón en la página número 8 de Cosas de Villel.
Los cipreses del cementerio siguen creciendo, formando la escalera mirando al cielo por donde todos vamos subiendo. Las estrellas del cielo del valle del Mesa son nuestros centinelas que nos iluminan en todos aquellos pasos que vamos dejando marcados durante nuestra vida. Será nuestro cementerio -la casa de todos-, que bajo el mismo suelo todos descansaremos.
Un distinto ambiente reina en nuestros pueblos durante estas fechas, tan familiares y entrañables, acompañado por el silencio otoñal, cuando las hojas de los árboles van cayendo, la brisa de las mañanas van dejando sus escarchas y las lluvias van empapando la tierra. Un mes de noviembre que va dejando el calendario sin días del año 2008, como si nos fuera abriendo la puerta del último mes de diciembre.
Con nuestro mayor recuerdo, que todos nuestros fieles difuntos descansen en paz por la misericordia de Dios.
FALLECE EL MÁS ANCIANO.
Después de una larga vida, nuestro amigo y vecino Antonio Colás falleció el día 4 de Noviembre, en fechas en las que habíamos dejado de conmemorar la festividad de todos los difuntos. Ya cerca de cumplir 100 años, Antonio deja a todos los vecinos el buen recuerdo, a sus familiares, sobrinos y en especial a Josefina, quien le ha atendido hasta el último momento.
Al terminar de escribir la crónica de nuestros cementerios, nos ha llegado la triste noticia, y hacemos llegar a sus familiares nuestro más sentido pésame.
Crónica en el Diario de Nueva Alcaría, viernes 07/11/2008, página 25.
