El nombre original de la villa era Aldea del Cuervo Los orígenes del
pueblo se desconocen, pero en una ladera, a unos 500 metros, del actual casco urbano, se encuentran restos de enterramientos visigodos. También en
cuevas se ven restos de haber sido habitadas en el pasado lejano, aunque no hay restos dignos de mención. CURIOSIDADES, LEYENDAS, ANÉCDOTAS Son tradicionales las hacenderas, que consiste en hacer trabajos para la comunidad: limpieza, cuidado de
jardines, corte de leña para El Teleclub y La
Fragua. Es de destacar la hacendera de
Carnaval, que se dedica a la plantación de
árboles en los
caminos y veredas del término. Si la hacendera ha sido de entidad se termina con una merienda de fraternidad. Una característica del pueblo es el alto grado de conciencia y confraternidad, podemos decir que en
ALDEALCORVO NADIE SE SIENTE FORASTERO. Existe la
costumbre, que cuando hay algún acontecimiento familiar,
bodas fundamentalmente, aparte de la celebración familiar, posteriormente se da una merienda a la que se invita a todos los que estén en el pueblo. El Teleclub, es el sitio de
reunión más habitual, tienen un pequeño
bar en el que los vecinos hacen de camareros por turnos, actualmente se está ampliando y reformando, después de esta obra podrá acoger hasta unas 8 mesas para jugar a las cartas (mus, tute, brisca…). La Fragua pensada fundamentalmente para las meriendas, dispone de 2
chimeneas para poder hacer buenas
parrilladas. Prueba del alto grado de convivencia es que son muy frecuentes las meriendas, disponen de buenos cocineros, unos profesionales y otros aficionados, todos ellos colaborando desinteresadamente. En temporada alta se hacen por grupos de edad, los mayores de 60 años, los maduros de 30 a 60 años y los jóvenes, solteros y casados, con sus niños pequeños. Estos dos últimos grupos son más adictos y celebran una a dos por semana, llegándose en ocasiones a reunirse más de 40 personas. En riguroso
invierno, suelen ser los domingos, casi todos, se reúnen de 14 a 16 personas, pues se adhieren algunos buenos
amigos de
pueblos vecinos o alguien que ha venido el fin de semana y retrasa el regreso a
Madrid por disfrutar de la merienda. Los fines de semana de
primavera y
otoño, los sábados, los jóvenes siempre están de merienda.