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ESTEBANVELA (Segovia)

La Iglesia. Otra perpectiva

Estebanvela enseña la vida del Paleolítico Superior
Guillermo Herrero - Estebanvela (Ayllón)

La séptima campaña de excavaciones en La Peña de Estebanvela, recientemente acabada, ha permitido descubrir un taller de sílex en el que los habitantes de este yacimiento paleolítico tallaban los útiles que luego usaban para cazar o pescar. La arqueóloga Carmen Cacho, codirectora de las investigaciones, ha confirmado que en un nivel datado hace aproximadamente unos 12.000 años apareció, junto a restos ... (ver texto completo)
Alabo tu buen gusto en relación a las reinetas, los otros buenos gustos tuyos se presuponen. Son tan buenas las reinetas de Estebanvela porque tienen agua los manzanos, buena tierra y sol. Eso les da un aspeto y sabor único. Quien lo probó y lo pueba lo sabe. Un saludo pasisanos. (Luis).
A mi me gustan mucho más las manzanas reinetas, son buenisimas y muy sanas.Creo que ya empiezan a recogerlas, las peras tambien estan muy buenas, y es que este pueblo tiene toda la fruta un sabor estupendo. Espero probarlas.
Si es que gustas de las peras de donguindo todavía quedan algunos perales. Si es que gustas del saboreo de estas huertas, hallarás la diferencia del riego, el sol, la tierra fértil que hace madurar en plenitud. Si descubres, si encuentras los matices, si das con lo único, entonces eres una persona dotada. Aquí la dulcedumbre entre los frutos, entre las reinetas y los limoncillos. Para tu boca sola la mejor manzana. Para el desvelo de tu lengua la mejor poma. Ahora mismo, yo misma, tengo el saboreo ... (ver texto completo)
¿Qué os pasa, os habeís ido todos de vacaciones? Si no os funciona en el pueblo nternet, podéis ir a la bibliotca de de Ayllón. Allí está en plena marcha este foro y otros. El foro no debería parar ningún día del año, porque entra mucha más gente de la que pensaís. Adios, paisanos.
Sí ya decía yo que algo se movía en la umbría del río Aguisejo.
De la fiesta regreso y apenas me sostengo. Tengo o me tienen dieciocho años. Pero eran la una, las dos y las tres. La Fiesta, amante de la noche bebió vino y veneno sobre el heno. Bailó desnuda entre los árboles de la huertas. La abrazaron todos con gemidos de placer en la oscuridad. ¡Qué derroche el canto del alimoche! La sangre vehículaba los alcoholes. ¿Sólo los alcoholes? Esta vez no hubo coche. ¡Si bebes no conduzcas! Para babas las de los caracoles subiéndose por las coles. Había otros animales ... (ver texto completo)
Volver, pasar, estar en la huerta. Esta vez, sí, cogí una manzana. Se puede saber cuantas semillas tiene una manzana, pero no cuantas manzanas caben en una semilla. Así que nunca termina una de volver y volver a su huerta. Mientras tanto bienvenidas las Fiestas del Pueblo para este Finde.(Ane).
La remodelación y adecentamiento de la Plaza del Pueblo con los elementos ornamentales precisos, es cosa que está pendiente todavía. ¡A ver qué hace la gente que no se espabila! ¿No ha habido en el pueblo, a lo largo de sus historia, ninguna figura importante para dedicársela? Solo servirá la placa de Plaza Mayor?
Ni el oro incandescente de tu ingenio, ni el integro zurrón de tus ideas, nos dan mayor consuelo y esperanza. El pueblo esta dormido y no despierta. Todo tu deshago, dama lista, que en excéntrico juego de palabras se prodiga, queriendo decir algo en puro intento, a la postre ¿de qué sirve, de qué? No cura sus heridas nuestra aldea. Está débil. Sangró demasiado tiempo atrás, lentamente, y ahora su anemia es evidente. Pero ahí está tu aire y tu donaire como soplo insuficiente para alzar el ánimo y ... (ver texto completo)
Esas rosas de carne y hueso que florecen exhalando saber y belleza por todo el pueblo, hacen vibrar de amor viriles corazones.
Esas rosas de carne y hueso que florecen y exhalan su saber y belleza por todo el pueblo, hacen vibrar de amor los viriles corazones.
Pedimos que se instalen placas en la calles del pueblo, anunciando el nombre de la calle correspondiente.
¡Pedimos que instalen placas con los nombres de la calles del pueblo!
La Piña del Oriundo Asusente, está llena de piñones, que no venga aquí "el facundo", a tocarnos los bemoles.