La torre de ladrillo se divide al exterior en tres cuerpos que se rematan en un chapitel de pizarra posterior sobre una cornisa rehecha en época barroca. Separan los cuerpos impostas con bandas de esquinillas, excepto en el lado occidental entre el segundo y tercero donde hay ni imposta ni banda de esquinillas.
La mitad inferior del lado oriental del primer cuerpo queda oculta por un ábside de calicanto que se le adosó más tarde. Sobre este ábside se aprecia la parte superior de dos vanos ciegos en arco de medio punto doblado, y sobre ellos otro doble vano, también en medio punto, pero esta vez simples, inscritos en rectángulos, todo ello en ladrillo, al igual que la banda de esquinillas que corre sobre el conjunto. Más arriba otra pareja de arquillos ciegos con banda de esquinillas en los laterales a la ... (ver texto completo)
La espléndida torre campanario que se levanta adosada a su costado meridional. De fábrica mixta, la parte inferior, hasta una altura de unos tres metros, es de mampostería encintada, para continuar hasta el cuerpo de campanas en sillarejo aparejado a espejo con ladrillos para enrasar las hiladas. Sobre este primer cuerpo se levanta la torre de ladrillo.
ambién destaca su la galería porticada, única conservada que rodea toda la iglesia menos la propia cabecera.

Los capiteles del ala norte son de gran calidad a pesar del deterioro de la piedra caliza y muestran todo un muestrario de escenas de la vida de Cristo. Entre ellas hay que destacar escenas tan divulgativas como una Anunciación, la Última Cena, el beso de Judas o el prendimiento de Jesús
La torre románico - mudéjar es soberbia. Muestra una gran anchura de base y fábrica de ladrillo con troneras de arco de medio punto. Las columnas, sin embargo, son pétreas.
En origen constaba de una sola nave cubierta con techumbre de madera y cabecera de presbiterio cerrado con cañón y ábside semicircular con bóveda de horno, todo levantado en sillería. La nave se construyó con mampostería encofrada de cal y canto, rematándose sus muros por aleros hoy muy restaurados. Al exterior, el ábside se ha articulado en tres paños por medio de dos columnas adosadas apoyadas sobre ménsulas de granito. En cada uno de estos paños se abren ventanas de medio punto con columnas.

A ... (ver texto completo)
Esta fachada esta realizado con el método del esgrafiado. Es un tipo de decoración que ya se usaba en época de los romanos.
Es una técnica bastante sencilla para embellecer las fachas construidas con materiales modestos como el tapial. Consiste en aplicar una capa de enfoscado que suele ser más oscura y rugosa (el mortero que se utiliza está hecho con agua, cal y arena, cemento o yeso).

Cuando está seco se aplica el revoco (otra capa de mortero más fina y lisa y de un color más claro), antes ... (ver texto completo)
Existe otra leyenda curiosa alrededor de este edificio y es la siguiente.

Se llama Catorcena a una festividad religiosa que se celebra el primer fin de semana de septiembre.

Tiene su origen en el año 1410 cuando el sacristán de la ya perdida iglesia de San Facundo, agobiado por sus muchas deudas, fue a pedirle un préstamo a un médico judío adinerado. Éste accedió a cambio de que el sacristán le entregase una hostia consagrada, y así lo hizo el sacristán esa noche en la calle del Malconsejo.

El ... (ver texto completo)
Existe una leyenda en torno al constructor del acueducto, por si hay quien no la conoce la voy a referir.

Hace muchísimo tiempo había en Segovia una joven aguadora, que pasaba todo el día yendo al río a por agua, pues servía en uno de los palacios en lo alto de la ciudad. Cansada de estar siempre subiendo y bajando se lamentaba mientras llenaba su cántaro "daría cualquier cosa por dejar de acarrear agua".
Enseguida el Diablo siempre al acecho se apareció a su lado y le preguntó " ¿de verdad darías ... (ver texto completo)
En la Plaza se dio en el Medievo la convivencia de la sinagoga Vieja, de una Madraza llamada entonces Corral del Moro, a la entrada de la plaza, y el Convento de los Mercedarios que ocupaba la mayor parte del espacio.
Es una iglesia sencilla que aparece entre los árboles de la Plaza, lo primero que nos llama la atención es su torre de ladrillo, tiene cinco cuerpos aparentemente iguales, pero no lo son, hay que fijarse en las ventanas que son de distinto grosor, hechura y decoración, donde se puede apreciar el estilo mudéjar.

Se levanto posteriormente a la iglesia y se encuentra adosada al pequeño ábside de cal y canto.
El ábside mayor está dividido por columnillas en tres paños, está desviado con respecto al eje de la nave, lo cual se interpreta como la inclinación de la cabeza de Cristo en la cruz.

Apoyada en este ábside se encontraba una de las tres puertas que cerraban el antiguo barrio de la Claustra.
En Segovia y su provincia las tejas no están mal puestas, o situadas del revés. Sólo aquí se da está singularidad. Son tejados de teja árabe que es una herencia mudéjar.
Los tejados de las casas se cubren de tejas que hacen de canal pero sólo con ellas (de ahí su nombre: canales), sin la cobija, que es como se llama a la teja que se pone encima para cubrir dos canales.

Son varias las hipótesis que se manejan de esta forma de colocar las tejas tan curiosa. Una de ellas dice que era una manera ... (ver texto completo)
Levantada en el siglo XII, ya existía en 1117, pues en el testamento de Domingo Petit aparece como testigo su abad.
Está situada en la actual plaza de Juan Bravo, a mitad de camino entre la catedral de Santa María y el acueducto romano. Se trata de un templo de origen mozárabe con estilo románico.
El Convento del Corpus Christi, hoy perteneciente a las hermanas Clarisas, fue uno de los centros religiosos de la comunidad judía de Segovia en la época medieval y una de las más importantes de las 5 sinagogas que tuvo la ciudad, pero hoy día, se duda que fuese la Sinagoga Mayor de Segovia, ya que estudios difieren con la Sinagoga de Ibañez que se situaba donde hoy hay un colegio, entre las actuales calle de Martínez Campos y la calle de la Refitolería.

Se cree que fue construída en torno al ... (ver texto completo)