Esta serie de barros corresponden a bordes de vasijas, pero esto habría que situarlo a este lado del año 1.000 antes de nuestra era. Sigue la
cerámica oscura conseguida con barro negro. Otro aspecto muy importante del asunto es que la mayoría de la cerámica conseguida en El
Castillo es diferente de la encontrada en la alquería del alfarero en el Prado Quintana-Los Comunes. Se conoce que los vecinos de El Castillo tenían o su propio alfarero o su propio suministrador de lo mismo. En épocas siguientes esto sigue de la misma forma y por ejemplo aquí en el Castillo, al igual que en el resto del
pueblo, no hay ni rastro de cerámica de época
romana "sigillata" muy común como veremos en la pequeña aldea de Los Comunes.