LA COSTUMBRE.- Todo mozo forastero que se ennoviase con una moza del pueblo tenìa la obligación de pagar lo que se llamaba la COSTUMBRE; un dinero a pagar a gusto del novio y de la valìa de la moza que se solía gastar en vino para toda la mocedad, de no pagarse o hacerse el remolón era llevado a la BOMBA para ser mojado. Un fuerte abrazo.