LAS CAMARENAS
Al fondo, allá donde alcanza la vista
al Guadarrama y sus cumbres nevadas,
en ese espacio de tierra adornada
por testas de encina y pino en ristra,
llano y ladera a lo hondo se alistan
en equilibrio y una magia alada
produce ese temblor en la enramada
como alma del conjunto impresionista.
A este mirador le llega su aroma,
mezclado con jara, tomillo, miera,
luz de Castilla y una mano sublime,
y expande la mente sus neuronas
llevando emoción a la verdadera
esencia íntima que a humano define.
Al fondo, allá donde alcanza la vista
al Guadarrama y sus cumbres nevadas,
en ese espacio de tierra adornada
por testas de encina y pino en ristra,
llano y ladera a lo hondo se alistan
en equilibrio y una magia alada
produce ese temblor en la enramada
como alma del conjunto impresionista.
A este mirador le llega su aroma,
mezclado con jara, tomillo, miera,
luz de Castilla y una mano sublime,
y expande la mente sus neuronas
llevando emoción a la verdadera
esencia íntima que a humano define.