Muchas personas, generalmente mujeres, están atendiendo a sus maridos, a quienes tienen que dedicar prácticamente todo su tiempo y, además, esto se da a una edad avanzada, cuando las facultades tanto físicas como psíquicas en ambos están muy mermadas. Esta función, dedicación o sacrificio permanente no suele ser valorada por la sociedad, es como algo que no cuenta, labor callada, sin embargo, importantísima y digna de elogio. En esta labor humana está inspirado el siguiente soneto que dedico a esas personas que practican el amor humano sin contraprestación alguna y que he titulado:
¿Qué es amor?
Del amor muchas personas hablamos,
mas que amemos o practiquemos, pocas.
Vivir para otro, desnudo, sin ropa,
sin esperar prestación ¿quiénes amamos?.
Día a día, toda una vida contemplamos
que alguien de nuestro entorno a otro se acopla
y en su alma y su vida desemboca.
Eso es amor, su Dios, aunque no creamos
pues su estar ahí, cuando el barco se hundía,
achicando el agua y abriendo la vía,
es, que es amor amar, no un dios vacío;
día y noche velando esa cantinela
sin bajar la guardia, fiel centinela
por amor al otro y a ti Padre mío.
Aranjuez, noviembre de 2008
Rufino Rodado Pérez.
¿Qué es amor?
Del amor muchas personas hablamos,
mas que amemos o practiquemos, pocas.
Vivir para otro, desnudo, sin ropa,
sin esperar prestación ¿quiénes amamos?.
Día a día, toda una vida contemplamos
que alguien de nuestro entorno a otro se acopla
y en su alma y su vida desemboca.
Eso es amor, su Dios, aunque no creamos
pues su estar ahí, cuando el barco se hundía,
achicando el agua y abriendo la vía,
es, que es amor amar, no un dios vacío;
día y noche velando esa cantinela
sin bajar la guardia, fiel centinela
por amor al otro y a ti Padre mío.
Aranjuez, noviembre de 2008
Rufino Rodado Pérez.