Otro año que no pudo ser, pero bueno, al menos lo hemos intentado y hemos dejado bien clarito a los del norte, que hay un
pueblo en el sur que practica el "jogo bonito" y que además gana partidos.
El año que viene reclamaremos la copa que la
historia nos robó el año pasado; siempre y cuando, las
bodas y despedidas nos lo permiten.
Arriba las Navas!