Situado en la provincia de Segovia, a 7 kilómetros de Arévalo, ya en la provincia de Ávila, en la altiplanicie castellana conocida como la Moraña, y a pocos kilómetros de la provincia de Valladolid. Dista de ciudades importantes: 60Km de Segovia, Avila y Valladolid, Rapariegos cuenta con una situación en Castilla y León privilegiada en cuanto a comunicaciones.

Y 120 km de Madrid y Salamanca. Se puede llegar directamente por la N-601 (Madrid-Valladolid) o por la N-VI hasta la altura de Arévalo cogiendo el desvío dirección Sancristobal de la Vega.

Posee dos plantas, en el edificio del ayuntamiento se encuentran la asociación de mujeres, la farmacia, la clínica rural y el piso de arriba es una casa de alquiler. Está gobernado por el PP, en los últimos tiempos están llevando numerosas políticas sociales que esperemos que den su fruto. El ayuntamiento debería aprovechar las oportunidades del turismo rural en verano que está en auge en Castilla y León, se echa de menos la existencia de una piscina, que sería una instalación muy provechosa para el pueblo, para las arcas municipales y para dar vida a este pequeño y hermoso municipio haciéndolo atractivo para el turismo estival.

Rapariegos es un caso único en la zona en que se sitúa, pues aún siendo un pequeño municipio, actualmente con el problema de la despoblación, cuenta con monumentos de un esplendoroso pasado. Cuenta con tres monumentos sobresalientes, el convento de clausura de Santa Clara de Asís en que habitan 16 religiosas, antiguamente el convento era un centro de poder en la zona y es conocida la devoción de la Reina Isabel I (Isabel La Católica) a santa clara, existen cuadros dentro del convento que atestiguan los largos paseos y jornadas de oración de la reina en Rapariegos. Es difícil disfrutar del convento por dentro, pues la tranquilidad que allí se respira y su ambiente es idéntico al que se respiraba en el siglo XII. se recomienda llamar al convento con antelación. También podemos adquirir confecciones artesanales de las monjas y productos de bollería, miel etc... todo ello producido artesanalmente. La Ermita del Santísimo Cristo de Moralejilla es el monumento mas antíguo de Rapariegos, aunque oficialmente la ermita de Rapariegos ha dejado de llamarse ermita, para llamarse Basílica Visigoda de Rapariegos, tras las ultimas investigaciones arqueológicas, data del siglo V o VI construido posiblemente sobre las ruinas de una iglesia de enormes proporciones, perteneció al pueblo de Moralejilla, hoy día deshabitado y derruido por la carcoma, quedando solo la Ermita, en ella los templarios adoraron a un pedazo de la veracruz traída de Tierra Santa, este monumento es digno de ser visitado. Por último tenemos la Iglesia de la Parroquia de San Pedro, posee una pila bautismal de grandes proporciones y de gran valor artístico, al igual que las esculturas que alberga en su interior, en la iglesia destaca su gran campanario que se considera el más ancho de Castilla y León y uno de los más anchos de Europa.

Rapariegos cuenta con numerosas fiestas, tanto en invierno como en verano. En invierno se celebra Los Santos Inocentes (28 de diciembre) que es una fiesta de los mozos del pueblo, en la que se bailan jotas en el baile, de lo contrario pueden recibir serios palazos, es una fiesta única en España y es muy curioso de ver. Hasta hace poco se celebraban San Antón (17 de Enero) con tres días de baile, pero el ayuntamiento decidió finalmente por suprimir la fiesta y también la de San Pedro (29 de junio), una verdadera pena, aunque se lleva celebrando la fiesta de verano (Santa Clara de Asís, el día 11 de agosto) que cuenta con un gran apoyo popular tanto en el pueblo como en los pueblos de alrededores y podemos asegurar la fiesta hasta bien entrado el día, esperemos que el ayuntamiento no suprima esta fiesta tan popular, pues cuenta con una buena reputación en la zona. También existen las dos fiestas anuales del cristo de Moralejilla el domingo siguiente a la cruz de mayo y el domingo siguiente a la cruz de de septiembre en el pueblo tienen entidad de fiesta, pero en realidad son unas fiestas de cofradía en la que dos hermanos de esta, cogen la bara o festejo y lo celebran, así que es una fiesta familiar muy bonita dado el rencuentro de gentes que no se ven en años.

La celebración de los Santos Inocentes es la fiesta más tradicional del pueblo, en la que se puede saltar a los corrales y tomar prestado cochinillos, pollos, conejos y demás, para quemarlo en la plaza de oriente y ofrecer los cochinillos, pollos, y conejos en una cena. En la hoguera también se puede recibir algún palo del alcalde y los perreros si no se baila la jota. La fiesta se alarga hasta el amanecer, se descansa un poco antes de ir a misa. Si no se está a la hora, los mozos irán a sacar de la cama al mozo despistado.

Escribir la historia de Rapariegos en unos cuantos renglones es imposible, pues cuenta con milenios de historia, se cree que los primeros pobladores de sus tierras fueron celtas, familias reales europeas han estado en su santo convento, en su ermita los templarios venidos de Jerusalén adoraron a un pedazo de la Vera Cruz de Cristo. El convento fue centro de poder en el pasado y pagaba tributos al arzobispado de Ávila, el convento fue destruido 3 veces parcialmente por incendios y otras tantas veces fue reconstruido. Se dispone de libros de historia de Rapariegos escritos por Cándido Ajo, profesor de historia de la universidad de Ávila.

Rapariegos es paso obligado en la ruta de los conventos. Es un lugar ideal para desconectar del trabajo, y un lugar bastante atractivo para edificar en los últimos años, tanto para vivir allí como para ir a veranear; pero se echa de menos una piscina, alguna zona verde y alguna casa rural, el precio del suelo es reducido lo que unido a sus buenas comunicaciones lo hacen un buen lugar para edificarse una casita de pueblo, para veranear o vivir como un vecino más. El turismo rural de Rapariegos, es todavía un filón.