Una mañana temprano del mes de junio, me di una vuelta cámara en mano por el convento y ante mi fueron apareciendo estas imagines que no pude dejar de fotografiar, era una mañana tranquila y un poco fresca pues estaba nublado y las flores todavía no se habían caído por el efecto de los rayos del sol, empecé a disparar la cámara y las fotos salían muy bien incluso a contraluz, pocas veces he visto estos campos cercanos al convento como en esa ocasión, tengo muchas fotos de ese día, muchas más de las...