La Sequoia
Detalle de la corteza.
El tronco es recto, cilíndrico, con ramas horizontales ligeramente encorvadas hacia abajo, y posee una corteza muy gruesa, suave y de un brillante color pardorrojizo que se va oscureciendo expuesta a la intemperie. Las hojas son de tamaños variables: entre 15-25 mm, largas y aplanadas en árboles jóvenes, y brotes a la sombra en la zona inferior de la copa de los ejemplares viejos, hasta 5-10 mm de largo en brotes expuestos a pleno sol en la parte superior de la copa de árboles más viejos; entre ambos extremos hay una amplia transición de tamaños. Son de color verde oscuro en las partes superiores y en la parte inferior poseen dos bandas con estomas blanco azuladas. La disposición de la hoja es espiral, aunque las más grandes y sombreadas están giradas hacia la base para conservar una posición plana y obtener la máxima luz posible. Los conos son ovoides, de 15-32 mm de largo con 15-25 escamas dispuestas en espiral; maduran entre 8-9 meses después de la polinización a finales de invierno. Cada escama de estos conos contiene entre 3 a 7 semillas, cada una de 3-4 mm de largo y 0,5 de ancho, con dos alas de 1 mm. Estas semillas son liberadas cuando las escamas maduran y se abren al secarse.
Detalle de la corteza.
El tronco es recto, cilíndrico, con ramas horizontales ligeramente encorvadas hacia abajo, y posee una corteza muy gruesa, suave y de un brillante color pardorrojizo que se va oscureciendo expuesta a la intemperie. Las hojas son de tamaños variables: entre 15-25 mm, largas y aplanadas en árboles jóvenes, y brotes a la sombra en la zona inferior de la copa de los ejemplares viejos, hasta 5-10 mm de largo en brotes expuestos a pleno sol en la parte superior de la copa de árboles más viejos; entre ambos extremos hay una amplia transición de tamaños. Son de color verde oscuro en las partes superiores y en la parte inferior poseen dos bandas con estomas blanco azuladas. La disposición de la hoja es espiral, aunque las más grandes y sombreadas están giradas hacia la base para conservar una posición plana y obtener la máxima luz posible. Los conos son ovoides, de 15-32 mm de largo con 15-25 escamas dispuestas en espiral; maduran entre 8-9 meses después de la polinización a finales de invierno. Cada escama de estos conos contiene entre 3 a 7 semillas, cada una de 3-4 mm de largo y 0,5 de ancho, con dos alas de 1 mm. Estas semillas son liberadas cuando las escamas maduran y se abren al secarse.