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La normativa sobre encierros prohibirá el uso de garrochas
Los caballistas defiende la utilidad que da en los recorridos campestres
Los caballistas no podrán utilizar las puyas con que conducen a los toros o novillos / PEñALOSA
Sólo en Cuéllar y Sangarcía podrán emplearse las puyas para conducir los toros
F. Descalzo - Segovia (El Adelantado de Segovia 31.05.05)
La nueva normativa regional sobre los encierros taurinos prohibirá el uso de garrochas, las varas de madera acabadas en un objeto metálico, con las que se ayudan los caballistas para conducir las reses bravas.
La medida, aprobada la semana pasada, supone un endurecimiento de las medidas para organizar los festejos taurinos y una nueva restricción para las localidades que celebran encierros y que el año pasado sumaron casi 150 festejos, según las cifras recogidas en el balance anual de la Delegación Territorial de la Junta.
El nuevo decreto hace una excepción en el caso de Cuéllar, por tratarse de una celebración declarada tradicional, al igual que en Sangarcía, las dos localidades segovianas con tal reconocimiento histórico, aunque en este último caso no se desarrollan por el campo desde hace varios años.
Algunos caballistas y alcaldes han apuntado la dificultad que supondrá esta medida para el normal desarrollo de los encierros. En todo caso, otros confían en que se prohiba la utilización pero no llevar la garrocha “porque es una herramienta muy útil como elemento intimidatorio o en casos extremos para protegerse”, explica Víctor Martín, uno de los jinetes que cada verano participa en numerosos encierros de la provincia.
El nuevo Reglamento de Espectáculos Taurinos, aprobado el jueves será publicado estos días y aplica novedades como la prohibición de que los participantes voluntarios, caballistas y corredores porten objetos o útiles que puedan dañar a los animales o perjudicar el buen desarrollo del espectáculo, restricción que afecta a la garrocha. Además también recupera la figura del delegado gubernativo, que se encarga de vigilar el desarrollo de los festejos taurinos populares y apoya al presidente del espectáculo a la vez que observa la seguridad de los participantes y debe garantizar la integridad de los animales que se emplean en los espectáculos.
Los caballistas defiende la utilidad que da en los recorridos campestres
Los caballistas no podrán utilizar las puyas con que conducen a los toros o novillos / PEñALOSA
Sólo en Cuéllar y Sangarcía podrán emplearse las puyas para conducir los toros
F. Descalzo - Segovia (El Adelantado de Segovia 31.05.05)
La nueva normativa regional sobre los encierros taurinos prohibirá el uso de garrochas, las varas de madera acabadas en un objeto metálico, con las que se ayudan los caballistas para conducir las reses bravas.
La medida, aprobada la semana pasada, supone un endurecimiento de las medidas para organizar los festejos taurinos y una nueva restricción para las localidades que celebran encierros y que el año pasado sumaron casi 150 festejos, según las cifras recogidas en el balance anual de la Delegación Territorial de la Junta.
El nuevo decreto hace una excepción en el caso de Cuéllar, por tratarse de una celebración declarada tradicional, al igual que en Sangarcía, las dos localidades segovianas con tal reconocimiento histórico, aunque en este último caso no se desarrollan por el campo desde hace varios años.
Algunos caballistas y alcaldes han apuntado la dificultad que supondrá esta medida para el normal desarrollo de los encierros. En todo caso, otros confían en que se prohiba la utilización pero no llevar la garrocha “porque es una herramienta muy útil como elemento intimidatorio o en casos extremos para protegerse”, explica Víctor Martín, uno de los jinetes que cada verano participa en numerosos encierros de la provincia.
El nuevo Reglamento de Espectáculos Taurinos, aprobado el jueves será publicado estos días y aplica novedades como la prohibición de que los participantes voluntarios, caballistas y corredores porten objetos o útiles que puedan dañar a los animales o perjudicar el buen desarrollo del espectáculo, restricción que afecta a la garrocha. Además también recupera la figura del delegado gubernativo, que se encarga de vigilar el desarrollo de los festejos taurinos populares y apoya al presidente del espectáculo a la vez que observa la seguridad de los participantes y debe garantizar la integridad de los animales que se emplean en los espectáculos.