Se ubica en el municipio toledano de
Guadamur, en Castilla-La Mancha. El
castillo está situado al este de la villa, en el cerro de la
Ermita, un pequeño promontorio bajo el que pasaba el arroyo que cruzaba el
pueblo. La
torre del
homenaje es un prisma de 30 m de altura con una base de 10 m por 15 m.
El
patio de armas y
palacio es de planta cuadrangular, de 20 m por 12 m. Los cuatro ángulos se rematan con
torreones circulares. En la mitad de cada muro surge un prisma de base triangular, una punta de estrella, solución de refuerzo que es de las primeras en su género y antecedente de la
arquitectura militar defensiva de los siglos xviii y xix. Palacio y torre son de mampostería granítica con piezas de sillería labrada. La planta baja del palacio (
capilla, cocina, dependencias de servicio, etc.) tiene cubierta abovedada; la planta principal (dependencias y dormitorios) tiene estructura adintelada y presenta artesonados.
En la segunda fase se construyeron un segundo cuerpo de palacio, una barrera exterior defensiva y un foso.
Detalle de las almenas del castillo
En la reconstrucción del siglo xix el conde de Cedillo plasmó en unos frescos de la planta noble la
excursión a Guadamur de los príncipes doña Juana y don Felipe (11 de julio de 1502).
Benito Pérez Galdós se refiere a esta restauración en su novela Ángel Guerra (segunda parte, capítulo III, sección VIII)