Mohedas vive en su trono
de esa tierra toledana,
la que pisara el buen Bono
en cualquier buena mañana.
Mohedas tiene su encanto
y su paisaje es dulzura,
la sierra tiene ese manto
que te cubre de ternura.
Las distancias no se encojen
ni tampoco el sentimiento,
más estas tierras acogen
sin poner duda un momento.
Extremadura a la vista
como testigo del tiempo,
el viento pasa revista
y ha Guadalupe da aliento.
Mohedas nunca se olvida
aunque se pasen los años,
hay mucha fecha perdida
y habrá que subir peldaños.
G X Cantalapiedra.
de esa tierra toledana,
la que pisara el buen Bono
en cualquier buena mañana.
Mohedas tiene su encanto
y su paisaje es dulzura,
la sierra tiene ese manto
que te cubre de ternura.
Las distancias no se encojen
ni tampoco el sentimiento,
más estas tierras acogen
sin poner duda un momento.
Extremadura a la vista
como testigo del tiempo,
el viento pasa revista
y ha Guadalupe da aliento.
Mohedas nunca se olvida
aunque se pasen los años,
hay mucha fecha perdida
y habrá que subir peldaños.
G X Cantalapiedra.