OCAÑA: Efectivamente, por anécdotas como la que cuentas, nunca...

Efectivamente, por anécdotas como la que cuentas, nunca hemos dejado de hablar y gracias a ese espíritu y a las ganas de arreglar las cosas, acordamos una solución satisfactoria para las dos hermandades. Puede que haya otras alternativas, pero que gusten a las dos partes es ya más difícil.