El juzgado anula otro acuerdo urbanístico a Martínez Osteso
HOY. PROVINCIA
Una nueva sentencia pone “en jaque” al alcalde de Ocaña, el “popular” José Carlos Martínez Osteso. Se trata del segundo varapalo, en dos, meses que reciben de los tribunales de Justicia. Y como en la anterior, hecha publica el pasado 3 de septiembre, en la que se emitía el día 1 de octubre, el Juzgado de lo Contencioso-Administrativo nº 1 de Toledo vuelve a dar la razón a la Junta de Comunidades en el recurso contra un acuerdo de la Junta Local del Ayuntamiento de Ocaña por el que se concedía licencia de obra para la construcción de 104 viviendas y garajes en la calle Cañada esquina con la calle Harina.
Según recoge la sentencia a la que ha tenido acceso EL DIA el juzgado ha estimado el recurso presentado por la Administración regional y declara “nulo el acuerdo”. Contra la misma cabe recurso de apelación en el Tribunal Superior de Justicia de Castilla-La Mancha, añade el fallo, en un plazo de quince días desde la notificación.
En este caso, como en la anterior sentencia referida a las viviendas de las calles Villar, Los Molinos, Palomarejo y Cardenal Reig, se concedió licencia “en suelo urbano calificado como industrial por las Normas Subsidiarias (NN SS) municipales, por lo que la edificación residencial autorizada “infringe las NN SS siendo el acuerdo recurrido nulo de pleno derecho pues supone operar una modificación urbanística al margen de todo procedimiento”, según la demanda planteada y que se recoge en los fundamentos de derecho de la sentencia. En los mismos se añade que el Ayuntamiento aunque reconoce la existencia de un “informe jurídico desfavorable”, aduce la existencia de otros técnicos “favorables” emitidos por el arquitecto municipal e invoca a la potestad interpretativa del Ayuntamiento el contenido de la norma.
De igual forma, en su defensa el Consistorio alega que se han concedido otras licencias “con la misma redacción que la impugnada” y que no han sido recurridas por la Junta.
Interpretación de la norma
Sobre estos aspectos el juzgado aclara que no caben interpretaciones del artículo 134 de la NN SS, que “define las características de las industrias que pueden ser emplazadas en este tipo de suelo industrial, pero en absoluto permite el uso residencial”, dando respuesta así a los argumentos municipales que aducen el uso compatible de ambas.
En los fundamentos de derecho también se apunta que el Ayuntamiento “olvida” el informe jurídico de la Secretaria y “pasa por alto” el informe del propio Colegio Oficial de Arquitectos encargado del visado del proyecto que también subraya que “no se admite el uso de vivienda”.
Asimismo señalan que “no cabe invocar el principio de igualdad en situaciones de ilegalidad” y que la Junta tiene impugnadas otras concesiones de licencias, recordando también la sentencia del 3 de septiembre y que declaraba nulo otro acuerdo similar.
La Delegación de Cultura, Artesanía y Turismo de Toledo ha iniciado la apertura de un expediente sancionador contra el Ayuntamiento de Ocaña por la ejecución de las obras de la Casa Consistorial, que incluyeron -entre otras acciones- la demolición de la escalera sin el consentimiento preceptivo de la Comisión de Patrimonio.
Según explicó el responsable de esta delegación, Jesús Nicolás, la apertura del expediente se iniciará con el nombramiento de instructor que determinará el tipo de infracción cometida, correspondiéndose habitualmente con una sanción económica.
Así mismo, manifestó Nicolás, el alcalde de Ocaña, José Carlos Martínez Osteso, aún no ha remitido al organismo provincial el visado de proyecto requerido por el Colegio de Arquitectos, condición obligatoria para poder continuar con los trabajos que se desarrollan en el municipio.
Por último y en relación a la sentencia del Juzgado de lo Contencioso Administrativo número 1 de Toledo que da la razón a la Junta de Comunidades de Castilla-La Mancha, el delegado de Cultura, que aseguró conocer la misma a través de este periódico, agregó que viene a confirmar que el alcalde de Ocaña “no muestra ningún respeto por el patrimino, la ley, ni la justicia”, una “verdad” que ha venido sosteniendo y que es “esclarecedora” en la sentencia.
HOY. PROVINCIA
Una nueva sentencia pone “en jaque” al alcalde de Ocaña, el “popular” José Carlos Martínez Osteso. Se trata del segundo varapalo, en dos, meses que reciben de los tribunales de Justicia. Y como en la anterior, hecha publica el pasado 3 de septiembre, en la que se emitía el día 1 de octubre, el Juzgado de lo Contencioso-Administrativo nº 1 de Toledo vuelve a dar la razón a la Junta de Comunidades en el recurso contra un acuerdo de la Junta Local del Ayuntamiento de Ocaña por el que se concedía licencia de obra para la construcción de 104 viviendas y garajes en la calle Cañada esquina con la calle Harina.
Según recoge la sentencia a la que ha tenido acceso EL DIA el juzgado ha estimado el recurso presentado por la Administración regional y declara “nulo el acuerdo”. Contra la misma cabe recurso de apelación en el Tribunal Superior de Justicia de Castilla-La Mancha, añade el fallo, en un plazo de quince días desde la notificación.
En este caso, como en la anterior sentencia referida a las viviendas de las calles Villar, Los Molinos, Palomarejo y Cardenal Reig, se concedió licencia “en suelo urbano calificado como industrial por las Normas Subsidiarias (NN SS) municipales, por lo que la edificación residencial autorizada “infringe las NN SS siendo el acuerdo recurrido nulo de pleno derecho pues supone operar una modificación urbanística al margen de todo procedimiento”, según la demanda planteada y que se recoge en los fundamentos de derecho de la sentencia. En los mismos se añade que el Ayuntamiento aunque reconoce la existencia de un “informe jurídico desfavorable”, aduce la existencia de otros técnicos “favorables” emitidos por el arquitecto municipal e invoca a la potestad interpretativa del Ayuntamiento el contenido de la norma.
De igual forma, en su defensa el Consistorio alega que se han concedido otras licencias “con la misma redacción que la impugnada” y que no han sido recurridas por la Junta.
Interpretación de la norma
Sobre estos aspectos el juzgado aclara que no caben interpretaciones del artículo 134 de la NN SS, que “define las características de las industrias que pueden ser emplazadas en este tipo de suelo industrial, pero en absoluto permite el uso residencial”, dando respuesta así a los argumentos municipales que aducen el uso compatible de ambas.
En los fundamentos de derecho también se apunta que el Ayuntamiento “olvida” el informe jurídico de la Secretaria y “pasa por alto” el informe del propio Colegio Oficial de Arquitectos encargado del visado del proyecto que también subraya que “no se admite el uso de vivienda”.
Asimismo señalan que “no cabe invocar el principio de igualdad en situaciones de ilegalidad” y que la Junta tiene impugnadas otras concesiones de licencias, recordando también la sentencia del 3 de septiembre y que declaraba nulo otro acuerdo similar.
La Delegación de Cultura, Artesanía y Turismo de Toledo ha iniciado la apertura de un expediente sancionador contra el Ayuntamiento de Ocaña por la ejecución de las obras de la Casa Consistorial, que incluyeron -entre otras acciones- la demolición de la escalera sin el consentimiento preceptivo de la Comisión de Patrimonio.
Según explicó el responsable de esta delegación, Jesús Nicolás, la apertura del expediente se iniciará con el nombramiento de instructor que determinará el tipo de infracción cometida, correspondiéndose habitualmente con una sanción económica.
Así mismo, manifestó Nicolás, el alcalde de Ocaña, José Carlos Martínez Osteso, aún no ha remitido al organismo provincial el visado de proyecto requerido por el Colegio de Arquitectos, condición obligatoria para poder continuar con los trabajos que se desarrollan en el municipio.
Por último y en relación a la sentencia del Juzgado de lo Contencioso Administrativo número 1 de Toledo que da la razón a la Junta de Comunidades de Castilla-La Mancha, el delegado de Cultura, que aseguró conocer la misma a través de este periódico, agregó que viene a confirmar que el alcalde de Ocaña “no muestra ningún respeto por el patrimino, la ley, ni la justicia”, una “verdad” que ha venido sosteniendo y que es “esclarecedora” en la sentencia.