No estoy seguro de que haya embiado este escrito, por eso lo escribo de nuevo. Cuando iva esta mañana a mis obligaciones, vi que otros no habian cumplido las suyas, las calles parecian pistas de hielo ¡Yo creia que el iceberg que se dirige hacia Australia habia tomado otra direccion!, a cada paso que daba era un dilema,"me cahere o nó" (peligrosa margarita para contar los petalos). Cada calle era un peligro, cada esquina, una trampa. Yo pensaba cuanto trataba de no morder el hielo en las personas mayores, en los niños, bueno en todos en general. Segun esta el pueblo alguien puede tener un grave accidente por no hacer un trabajo quien lo debe de hacer. Pero menos mal que salio el SOL "EL ASTRO REY" que ha hechado una buena mano a los ¡SEVICIOS DEL AYNTAMIENTO", derritiendo gran parte del hielo y de nive para que mas tarde medio podamos andar por las calles ¡pero cuidado con las aceras! que no todas son de fiar.