OCAÑA: Dado que el estado es una comunidad natural de individuos...

Dado que el estado es una comunidad natural de individuos que cooperan y coordinan para vivir, es necesario un buen gobierno. Nicolás Maquiavelo, figura relevante durante el Renacimiento italiano, y Platón, filósofo griego, comparten algunas características de su forma de ver el estado, aunque también se contraponen en otras. Por un lado, Nicolás Maquiavelo y Platón vivieron en épocas de grandes logros y cambios en sus respectivos países. Ambos querían conseguir una especie de estado en el cual había de ser característica la felicidad de los individuos, aunque para ambos con puntos de vista diferentes, que conllevan a consecuencias distintas.
Según opinaba Maquiavelo, el cargo de la política debía ejercerlo un hombre ideal y virtuoso, con la capacidad de superar la república en conjunto. Podemos observar su oposición a la república concluida en “El príncipe”, tratado de doctrina política en el cual muestra como se debería comportar Lorenzo II de Médici para conseguir unificar Italia y sacarla de la crisis. Diremos entonces que Maquiavelo pretende conseguir un estado en el que todos sean felices según sus pensamientos, y observando la realidad, plantea una solución práctica en las guerras, consiguiendo así un estado basado en la fuerza para sobrevivir. Por eso, fue conocido por la frase “el fin justifica los medios”, en la cual justificaba que no era necesario tener escrúpulos, y la ética y la moral no eran precisas en un gobernante. Según él, un estado fuerte era sinónimo de la felicidad.
Sin embargo, por otro lado se encuentra Platón, el cual pretende conseguir un Estado Ideal, presentando una utopía ante el “realismo” de Maquiavelo. Para que un estado sea Ideal, conlleva a que se cumpla cierta justicia en él, por ello, antepone el bien común al del individual. Según Platón, el estado se encuentra en situación justa cuando se cumple una armonía respetando la jerarquía natural del alma, de la cual surgen tres grupos humanos naturales. Podemos encontrar a los productores, a los guardianes, y a los filósofo-gobernantes, estos últimos tienen la función de gobernar y dirigir el Estado, recibiendo una educación especial en la cual se destaca el estudio de las Matemáticas y la Dialéctica. Para llevar a la práctica la función de los filósofos-gobernantes, primero se debe seleccionar a las mejores naturalezas, es decir, individuos con mayor capacidad innata. En segundo lugar, se debe educar para enderezar y potenciar esa capacidad hacia la contemplación de las Ideas eternas. Una vez han conseguido llegar a la contemplación de las Ideas, deben ser forzados a gobernar y adentrarse en los asuntos humanos. Por eso, para Platón un gobierno de filósofos es el único capaz de gobernar hacia la luz de las Ideas, según él, consideradas realidades eternas, inmateriales e inmutables, solo accesibles a la inteligencia, y los modelos perfectos que se deben imitar de forma imperfecta.
Así como Maquiavelo pensaba que no era necesario tener ética y moral para poder gobernar, Platón enlazaba a los filósofos-gobernantes directamente con la ética, ya que para este, la felicidad consistía en ser justos.
De este modo, encontramos que dos filósofos de época y pensamientos diferentes pretenden llegar a un mismo fin basándose en el Estado ya que piensan en conseguir la felicidad del individuo si el propio estado se lo permite, pero teniendo una visión diferente del mismo