"Atendiendo al interés mostrado por algunos padres para que manifieste mi opinión personal sobre lo que pienso del nuevo Equipo Directivo del Colegio Público "Pastor Poeta" de Ocaña, tras haberse celebrado elecciones hace unos días, manifiesto las siguientes consideraciones.
Tras felicitar al nuevo Equipo Directivo, les deseé suerte en su gestión y a modo de descripcion dije: El nuevo Equipo Directivo es jóven y por tanto deben traer ilusión, fortaleza, modernidad y esperanza.
Eso fue lo que escribí y en ello me reafirmo. Para mí, la juventud no es una virtud, ni un inconveniente, es un maravilloso estado de ánimo, que a veces coincide en los individuos con el periodo comprendido entre la infancia y la edad adulta.
A mí no me importa en absoluto que al anterior director, quien goza de todos mis respetos, le interasara o no la reelección, ni me importa que se despistara a la hora de presentar el exigible Proyecto de Dirección a Centros Públicos de Enseñanza, ni se confiara porque creyera lo que creyera... A mí lo único que me importa es la formación, la educación, la felicidad y la seguridad de los alumnos. Ellos son para mí los protagonistas de este y todos los demás centros de enseñanza.
Respeto absolutamente la libertad de los padres a la hora de poder elegir centro de enseñanza para sus hijos, si este fuere público, concertado o privado lo sería porque así lo querrían y así lo estimarían según sus intereses o necesidades.
Yo lo que pido, exijo más bien, es que los centros de enseñanza sean el lugar donde sólo puedan anidar la educación, la enseñanza, la formación, el respeto, la libertad, el orden, la disciplina, la excelencia y sobre todo, el más puro de los humanismos...
¿Lo demás? Lo demás no me importa. No me importan los intereses de los adultos, ni sus pretensiones, ni sus ambiciones, ni sus ideologías, ni sus curriculums... Me importan los niños, es decir los alumnos. Y que nadie se le olvide, que por encima de todas las etiquetas que me quieran colgar, la única a la que nunca renunciaré es a mi condición de padre comprometido".
José Pérez Maya
Padre de Familia y Concejal del Ayuntamiento de Ocaña. ¿Se puede ser más?
Tras felicitar al nuevo Equipo Directivo, les deseé suerte en su gestión y a modo de descripcion dije: El nuevo Equipo Directivo es jóven y por tanto deben traer ilusión, fortaleza, modernidad y esperanza.
Eso fue lo que escribí y en ello me reafirmo. Para mí, la juventud no es una virtud, ni un inconveniente, es un maravilloso estado de ánimo, que a veces coincide en los individuos con el periodo comprendido entre la infancia y la edad adulta.
A mí no me importa en absoluto que al anterior director, quien goza de todos mis respetos, le interasara o no la reelección, ni me importa que se despistara a la hora de presentar el exigible Proyecto de Dirección a Centros Públicos de Enseñanza, ni se confiara porque creyera lo que creyera... A mí lo único que me importa es la formación, la educación, la felicidad y la seguridad de los alumnos. Ellos son para mí los protagonistas de este y todos los demás centros de enseñanza.
Respeto absolutamente la libertad de los padres a la hora de poder elegir centro de enseñanza para sus hijos, si este fuere público, concertado o privado lo sería porque así lo querrían y así lo estimarían según sus intereses o necesidades.
Yo lo que pido, exijo más bien, es que los centros de enseñanza sean el lugar donde sólo puedan anidar la educación, la enseñanza, la formación, el respeto, la libertad, el orden, la disciplina, la excelencia y sobre todo, el más puro de los humanismos...
¿Lo demás? Lo demás no me importa. No me importan los intereses de los adultos, ni sus pretensiones, ni sus ambiciones, ni sus ideologías, ni sus curriculums... Me importan los niños, es decir los alumnos. Y que nadie se le olvide, que por encima de todas las etiquetas que me quieran colgar, la única a la que nunca renunciaré es a mi condición de padre comprometido".
José Pérez Maya
Padre de Familia y Concejal del Ayuntamiento de Ocaña. ¿Se puede ser más?