Hola a todos !
Estuve en Sotillo el fin de año. Por cierto, un poco movidito. La gente como siempre, encantadora, el chozo impresionante, las uvas perfectas y el tiempo acompaño. Pero la nota, como siempre sucede, la dieron los desaprensivos que en cada pueblo habitan y Sotillo no puede ser menos.
Que si el chozo se quema, que si el chozo no se quema, que viene la Guardia Civil, y un montón de cosas más. Pues bien, yo no sé si el Alcalde es bueno o malo ( eso lo dirán las próximas elecciones ), lo qué si sé es que mientras él organizaba los actos de Fin de año para que nadie se quedara sin uvas ni bebida, mientras se preocupaba por la seguridad de lo que pudiera pasar en la quema del chozo, mientras él no dormía pensando como saldría ese día tan especial, otros muralistas sin gracia ni desgracia, que solo saben escribir con botes de pintura y con faltas de ortografía, por cierto, se dedicaban a hacer lo que mejor saben: molestar. Y molestaron al pueblo, a sus gentes, a su propio alcalde y a su familia; eso si, siempre con nocturnidad y anomimato. Valientes cobardes, ¿ Dónde estabais a la mañana siguiente ? Yo al alcalde lo vi es su puesto trabajando por la noche de fiesta que se avecinaba, ¿ y vosotros ? Y esos lemas fascistas, ¿ quien os los enseño ?; dudo mucho que de vuestras cabezas huecas o probablemente llenas de alcohol puediera salir algo así.
Defended vuestros intereses dando la cara, luchando por vuestros objetivos en los plenos, con los vecinos, exigiendo al alcalde, que para eso está; pero amenazando, manchando el pueblo con pintura negra y expresiones propias de la época hitleriana, poco vais a lograr. De momento solo una cosa, Don Angel Corrochano, Alcalde de Sotillo de las Palomas, supo estar a la altura y a pesar de todo, estaba allí con los vecinos, olvidando o intentando olvidar los incidentes, por que eso si, le afectaron como lo haría a cualquier persona de bien. Esta vez os ha ganado la batalla simplemente sin hacer nada, solo trabajando para el pueblo. Imaginaros que como vosotros entrara en acción: desaparecerías de un plumazo o almenos vuestras acciones vandálicas y sin sentido. Felicidades Alcalde, una vez más supo estar a la altura de la circunstancias y creame que no comparto para nada las teorías políticas de su partido, ni simpatizo con la mayoría de las acciones de los políticos, pero con usted si, porque no hace política, simplemente trabaja como sabe para el pueblo. No sé si bien o mal, pero lo hace. Otros no, solo se esconden y pintan, perdón manchan. En este casos, son ellos los que estan "errados" o quizás deberiamos decir " herrados".¡ Saben ustedes cual es la diferencia entre unos y otros ? Al alcalde lo eligió y lo pusó donde está el pueblo, a los otros ni se sabe, probablemente ni sus propios padres sepan nada de lo que están haciendo y los que lo saben, seguramente se averguencen, pero son tan buenos sotillanos que discretamente disimulan su verguenza, justifican a sus hijos como cualquier padre haría y después pidan disculpas en su nombre al que, hoy por hoy, pese a quien le pese, es nuestro alcalde.
Estuve en Sotillo el fin de año. Por cierto, un poco movidito. La gente como siempre, encantadora, el chozo impresionante, las uvas perfectas y el tiempo acompaño. Pero la nota, como siempre sucede, la dieron los desaprensivos que en cada pueblo habitan y Sotillo no puede ser menos.
Que si el chozo se quema, que si el chozo no se quema, que viene la Guardia Civil, y un montón de cosas más. Pues bien, yo no sé si el Alcalde es bueno o malo ( eso lo dirán las próximas elecciones ), lo qué si sé es que mientras él organizaba los actos de Fin de año para que nadie se quedara sin uvas ni bebida, mientras se preocupaba por la seguridad de lo que pudiera pasar en la quema del chozo, mientras él no dormía pensando como saldría ese día tan especial, otros muralistas sin gracia ni desgracia, que solo saben escribir con botes de pintura y con faltas de ortografía, por cierto, se dedicaban a hacer lo que mejor saben: molestar. Y molestaron al pueblo, a sus gentes, a su propio alcalde y a su familia; eso si, siempre con nocturnidad y anomimato. Valientes cobardes, ¿ Dónde estabais a la mañana siguiente ? Yo al alcalde lo vi es su puesto trabajando por la noche de fiesta que se avecinaba, ¿ y vosotros ? Y esos lemas fascistas, ¿ quien os los enseño ?; dudo mucho que de vuestras cabezas huecas o probablemente llenas de alcohol puediera salir algo así.
Defended vuestros intereses dando la cara, luchando por vuestros objetivos en los plenos, con los vecinos, exigiendo al alcalde, que para eso está; pero amenazando, manchando el pueblo con pintura negra y expresiones propias de la época hitleriana, poco vais a lograr. De momento solo una cosa, Don Angel Corrochano, Alcalde de Sotillo de las Palomas, supo estar a la altura y a pesar de todo, estaba allí con los vecinos, olvidando o intentando olvidar los incidentes, por que eso si, le afectaron como lo haría a cualquier persona de bien. Esta vez os ha ganado la batalla simplemente sin hacer nada, solo trabajando para el pueblo. Imaginaros que como vosotros entrara en acción: desaparecerías de un plumazo o almenos vuestras acciones vandálicas y sin sentido. Felicidades Alcalde, una vez más supo estar a la altura de la circunstancias y creame que no comparto para nada las teorías políticas de su partido, ni simpatizo con la mayoría de las acciones de los políticos, pero con usted si, porque no hace política, simplemente trabaja como sabe para el pueblo. No sé si bien o mal, pero lo hace. Otros no, solo se esconden y pintan, perdón manchan. En este casos, son ellos los que estan "errados" o quizás deberiamos decir " herrados".¡ Saben ustedes cual es la diferencia entre unos y otros ? Al alcalde lo eligió y lo pusó donde está el pueblo, a los otros ni se sabe, probablemente ni sus propios padres sepan nada de lo que están haciendo y los que lo saben, seguramente se averguencen, pero son tan buenos sotillanos que discretamente disimulan su verguenza, justifican a sus hijos como cualquier padre haría y después pidan disculpas en su nombre al que, hoy por hoy, pese a quien le pese, es nuestro alcalde.