Creo que no es correcta tu interpretación, pues no es al retablo, ni a lo que representa, a lo que se rinde culto en los respectivos altares, sino al Santísimo dentro de su Sagrario. Partiendo de esa premisa, hoy se sigue situando el Sagrario en el mismo lugar, que tras la reforma conciliar, ha quedado a espaldas del oficiante. Los retablos, más que para rendirles culto, servían como conjuntos iconográficos de naturaleza didáctica, ante los que el fiel veía reflejados distintos pasajes evangélicos. ¿ Por qué no un nuevo retablo para nuestra iglesia?