MEMORIAS DE MÍ INFANCIA Y JUVENTUD
EN MÍ VILLA TOLEDANA DE VILLANUEVA DE ARCARDETE.
Hoy me acuerdo del pueblo, cuando era pequeña por las nevadas que caían, en estas fechas navideñas, recuerdo que había días que al levantarnos de la cama, estaba la calle cubierta de nieve, y no podíamos salir de casa, sin que los hombres con palas y otros menesteres, hicieran calles para poder andar, entonces salíamos y jugábamos en la nieve, nos tirábamos bolas y hacíamos muñecos, le poníamos gafas, gorro, bufanda, y una garrota, después cantábamos dando vueltas a su alrededor. Era costumbre en la víspera de Navidad, hacer los dulces que consistían en tortas, galletas, magdalenas, sequillos y mantecados. Nos íbamos al horno con las latas para colocar los dulces, y con todos los ingredientes, tales como azúcar, harina, huevos, leche, limón, y una vez todos reunidos, empezábamos el trabajo, nos juntábamos casi toda la gente del pueblo y pasábamos la tarde, y parte de la noche allí, cuando se terminaba de hacer, nos juntábamos para, distribuir los dulces entre todos los vecinos, cuando se terminaba de hacer los dulces, íbamos colocándolo, en una cesta de mimbre que la cubríamos con un paño blanco, a la noche siguiente era costumbre de pedir la torta, nos reuníamos varios chicos y chicas con zambombas, que era una especie de tambor, que estaba hecha con la piel del cerdo, y es un instrumento musical casero, que en estas fechas de Navidad era lo que en aquel momento a la juventud le gustaba, y era lo que entonces había, que se solía hacer en muchas casas del pueblo, donde existía gente joven, para su diversión.
Rosario Fajardo Blanco.
EN MÍ VILLA TOLEDANA DE VILLANUEVA DE ARCARDETE.
Hoy me acuerdo del pueblo, cuando era pequeña por las nevadas que caían, en estas fechas navideñas, recuerdo que había días que al levantarnos de la cama, estaba la calle cubierta de nieve, y no podíamos salir de casa, sin que los hombres con palas y otros menesteres, hicieran calles para poder andar, entonces salíamos y jugábamos en la nieve, nos tirábamos bolas y hacíamos muñecos, le poníamos gafas, gorro, bufanda, y una garrota, después cantábamos dando vueltas a su alrededor. Era costumbre en la víspera de Navidad, hacer los dulces que consistían en tortas, galletas, magdalenas, sequillos y mantecados. Nos íbamos al horno con las latas para colocar los dulces, y con todos los ingredientes, tales como azúcar, harina, huevos, leche, limón, y una vez todos reunidos, empezábamos el trabajo, nos juntábamos casi toda la gente del pueblo y pasábamos la tarde, y parte de la noche allí, cuando se terminaba de hacer, nos juntábamos para, distribuir los dulces entre todos los vecinos, cuando se terminaba de hacer los dulces, íbamos colocándolo, en una cesta de mimbre que la cubríamos con un paño blanco, a la noche siguiente era costumbre de pedir la torta, nos reuníamos varios chicos y chicas con zambombas, que era una especie de tambor, que estaba hecha con la piel del cerdo, y es un instrumento musical casero, que en estas fechas de Navidad era lo que en aquel momento a la juventud le gustaba, y era lo que entonces había, que se solía hacer en muchas casas del pueblo, donde existía gente joven, para su diversión.
Rosario Fajardo Blanco.