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¿QUE PASA CUANDO ESTAMOS LLEGANDO A LA META FINAL?
Antes no lo pensaba, pero ahora que me estoy acercando sí que lo pienso, hace unos años yo decía que lo tenía asumido, para irme a una residencia, pero después de la experiencia que he vivido con un familiar, no lo tengo tan claro, mejor dicho me horroriza, es deprimente ver a todas esas personas en ese estado esperando que llegue la hora de su partida, si tienes la cabeza perdida, y no te enteras de lo que pasa a tu alrededor pues vale, pero los que están bien y lo ven todo, tiene que ser muy angustioso, saben que no hay vuelta atrás, solo les quedan sus recuerdos, después de toda una vida trabajando, sacando a sus hijos adelante, dándoles una carrera y privándose el matrimonio de muchísimas cosas, ellos terminan en esa situación. Claro que con el progreso es lo que toca, entiendo que es muy difícil hacerse cargo de una persona mayor, pues en la mayoría de los casos, las casas no reúnen las condiciones adecuadas, por otro lado trabajan los dos, cuando entran en casa muchas veces sus hijos ya están acostados, no tienen tiempo para ellos ¿cómo demonios van a tenerlo para los abuelos? Vivimos demasiado deprisa, y muchas veces se vive para trabajar, cuando debería ser trabajar para vivir, y así se nos pasan los años, nos llega la jubilación y vuelta a empezar, por eso creo que tendríamos que pararnos, pensar que es lo más importante, pero no lo hacemos, lo pensamos cuando solo nos quedan los recuerdos. ¿Qué es lo que ha pasado?, no hace tantos años, los abuelos estaban con los hijos, los niños jugábamos con ellos, yo tengo recuerdos maravillosos, de las historias que me contaban, ellos eran más felices porque estaban integrados en la familia, se sentían parte de ella, a pesar de que en ese tiempo eran muy pocos los que recibían una paga, pero las familias se arreglaban con lo que había, ahora a pesar de que todos los mayores tienen su paga, no es posible temerlos en familia, sin darnos cuenta de que esto es como una noria, cuando da un par de vueltas el que está arriba sé queda abajo, y vuelta a empezar, si no nos queda más remedio que irnos a la residencia, al menos que alguien se ocupe de que nos traten como a personas, que no se vuelva a ver cómo, algunos cuidadores maltratan a los ancianos. Quiero dar la enhorabuena a esos cuidadores que tienen a sus mayores en casa, me costa que son muchos, pero son anónimos, conozco a más de dos, quiero resaltar a un matrimonio, que son mis amigos, no digo su nombre por si no les gusta, pero si lo leen ya saben que me refiero a ellos, bien toda su vida han cuidado de una persona hasta que le llego la hora de partir, este matrimonio trabajaban los dos, a pesar de todo encontraron el modo de tener a su tía en casa, pero no solo eso, ahora están haciendo lo mismo con su otra tía, privándose de disfrutar de su nietecita, y teniéndose que desplazarse todos los meses fuera de Madrid, enhorabuena amigos sois únicos y un ejemplo a seguir.
Rosario Fajardo Blanco
Antes no lo pensaba, pero ahora que me estoy acercando sí que lo pienso, hace unos años yo decía que lo tenía asumido, para irme a una residencia, pero después de la experiencia que he vivido con un familiar, no lo tengo tan claro, mejor dicho me horroriza, es deprimente ver a todas esas personas en ese estado esperando que llegue la hora de su partida, si tienes la cabeza perdida, y no te enteras de lo que pasa a tu alrededor pues vale, pero los que están bien y lo ven todo, tiene que ser muy angustioso, saben que no hay vuelta atrás, solo les quedan sus recuerdos, después de toda una vida trabajando, sacando a sus hijos adelante, dándoles una carrera y privándose el matrimonio de muchísimas cosas, ellos terminan en esa situación. Claro que con el progreso es lo que toca, entiendo que es muy difícil hacerse cargo de una persona mayor, pues en la mayoría de los casos, las casas no reúnen las condiciones adecuadas, por otro lado trabajan los dos, cuando entran en casa muchas veces sus hijos ya están acostados, no tienen tiempo para ellos ¿cómo demonios van a tenerlo para los abuelos? Vivimos demasiado deprisa, y muchas veces se vive para trabajar, cuando debería ser trabajar para vivir, y así se nos pasan los años, nos llega la jubilación y vuelta a empezar, por eso creo que tendríamos que pararnos, pensar que es lo más importante, pero no lo hacemos, lo pensamos cuando solo nos quedan los recuerdos. ¿Qué es lo que ha pasado?, no hace tantos años, los abuelos estaban con los hijos, los niños jugábamos con ellos, yo tengo recuerdos maravillosos, de las historias que me contaban, ellos eran más felices porque estaban integrados en la familia, se sentían parte de ella, a pesar de que en ese tiempo eran muy pocos los que recibían una paga, pero las familias se arreglaban con lo que había, ahora a pesar de que todos los mayores tienen su paga, no es posible temerlos en familia, sin darnos cuenta de que esto es como una noria, cuando da un par de vueltas el que está arriba sé queda abajo, y vuelta a empezar, si no nos queda más remedio que irnos a la residencia, al menos que alguien se ocupe de que nos traten como a personas, que no se vuelva a ver cómo, algunos cuidadores maltratan a los ancianos. Quiero dar la enhorabuena a esos cuidadores que tienen a sus mayores en casa, me costa que son muchos, pero son anónimos, conozco a más de dos, quiero resaltar a un matrimonio, que son mis amigos, no digo su nombre por si no les gusta, pero si lo leen ya saben que me refiero a ellos, bien toda su vida han cuidado de una persona hasta que le llego la hora de partir, este matrimonio trabajaban los dos, a pesar de todo encontraron el modo de tener a su tía en casa, pero no solo eso, ahora están haciendo lo mismo con su otra tía, privándose de disfrutar de su nietecita, y teniéndose que desplazarse todos los meses fuera de Madrid, enhorabuena amigos sois únicos y un ejemplo a seguir.
Rosario Fajardo Blanco