QUE NO SE TUERZA EL OTOÑO
Estamos como temblando en este otoño rabioso,
que quiere vernos llorando con su ritmo contagioso.
Por los llanos de La Mancha donde se ven los barbechos,
cualquier contagio te engancha para borrar los derechos.
Que no se tuerza el otoño, en estas serias semanas,
lo comentan en Logroño y en las tierras castellanas.
Vienen gritando los vientos por los caminos del mundo,
y proclaman sufrimientos con ese virus absurdo.
La noche se va torciendo entre vientos tormentosos,
parece que está diciendo que quiere llantos honrosos.
El otoño va llegando con sus rabias de epidemia,
y lo vemos complicando hasta la misma tragedia.
La Mancha busca salidas a estos virus tan rabiosos,
que ven perdidas las vidas con sus males horrorosos.
Las razones van temblando en las noches delicadas,
hospitales que curando no existen camas vaciadas.
Las penas llegan flotando sin entender de razones,
muchas personas llorando en su mar de confusiones.
Noches tristes de hospitales donde la muerte cabalga,
son esos casos fatales que la guadaña se alarga.
Caminos tiene está vida que la muerte los embarga,
primero te hacen la herida y luego te descabalga.
Las distancias son razones que pueden darte la calma,
hoy sobran las emociones, y las promesas del alma.
La guadaña nos espera para seguir trabajando,
no quiere la primavera ni ver el campo brotando.
Con el corazón sintiendo la pandemia maldecida,
a veces vamos diciendo que dura viene la vida.
G X Cantalapiedra.
Estamos como temblando en este otoño rabioso,
que quiere vernos llorando con su ritmo contagioso.
Por los llanos de La Mancha donde se ven los barbechos,
cualquier contagio te engancha para borrar los derechos.
Que no se tuerza el otoño, en estas serias semanas,
lo comentan en Logroño y en las tierras castellanas.
Vienen gritando los vientos por los caminos del mundo,
y proclaman sufrimientos con ese virus absurdo.
La noche se va torciendo entre vientos tormentosos,
parece que está diciendo que quiere llantos honrosos.
El otoño va llegando con sus rabias de epidemia,
y lo vemos complicando hasta la misma tragedia.
La Mancha busca salidas a estos virus tan rabiosos,
que ven perdidas las vidas con sus males horrorosos.
Las razones van temblando en las noches delicadas,
hospitales que curando no existen camas vaciadas.
Las penas llegan flotando sin entender de razones,
muchas personas llorando en su mar de confusiones.
Noches tristes de hospitales donde la muerte cabalga,
son esos casos fatales que la guadaña se alarga.
Caminos tiene está vida que la muerte los embarga,
primero te hacen la herida y luego te descabalga.
Las distancias son razones que pueden darte la calma,
hoy sobran las emociones, y las promesas del alma.
La guadaña nos espera para seguir trabajando,
no quiere la primavera ni ver el campo brotando.
Con el corazón sintiendo la pandemia maldecida,
a veces vamos diciendo que dura viene la vida.
G X Cantalapiedra.