LA MANCHA Y UCRANIA
La distancia si se nota, es tremenda su llanura, el horizonte nos flota y sabemos de amargura. Don Quijote por La Mancha queriendo arreglar entuertos, la historia cuando te engancha no ve los campos desiertos. Ucrania con sus llanuras, donde crecen los cereales, son tierras de agriculturas entre gentes muy normales. Campesinos de su tierra que les invaden los rusos, con una penosa guerra cargada de mil abusos. Las llanuras parecidas, con costumbres ancestrales, con ciertas guerras perdidas con invasores fatales. Cuantas veces Don Quijote por esas grandes llanuras, notó que llega algún brote entre temidas diabluras. Tierras llenas de sudores, agricultores con alma, muchos son trabajadores que quieren gozar su calma. Los vientos marcan las horas de tan tremendas llanuras, y los cereales adornan esas preciosas dulzuras. Cuando miro al horizonte el corazón se emociona, aunque quede fuera el monte esta llanura ilusiona. Ucranianos luchadores por sus propias libertades, que se ven trabajadores entre ciertas falsedades. Con el amor a su tierra, con la razón por delante, si perdieran esta guerra sería siempre humillante. Algunas tierras perdidas, otras con daños fatales, sus gentes siguen erguidas en momentos especiales. Son parecidas llanuras, con sus brisas y sus aires, las guerras dejan locuras envueltas entre desaires. La Mancha ve reflejada sus llanuras bajo el fuego, Ucrania sigue dañada aunque vivamos su ruego. G X Cantalapiedra.
La distancia si se nota, es tremenda su llanura, el horizonte nos flota y sabemos de amargura. Don Quijote por La Mancha queriendo arreglar entuertos, la historia cuando te engancha no ve los campos desiertos. Ucrania con sus llanuras, donde crecen los cereales, son tierras de agriculturas entre gentes muy normales. Campesinos de su tierra que les invaden los rusos, con una penosa guerra cargada de mil abusos. Las llanuras parecidas, con costumbres ancestrales, con ciertas guerras perdidas con invasores fatales. Cuantas veces Don Quijote por esas grandes llanuras, notó que llega algún brote entre temidas diabluras. Tierras llenas de sudores, agricultores con alma, muchos son trabajadores que quieren gozar su calma. Los vientos marcan las horas de tan tremendas llanuras, y los cereales adornan esas preciosas dulzuras. Cuando miro al horizonte el corazón se emociona, aunque quede fuera el monte esta llanura ilusiona. Ucranianos luchadores por sus propias libertades, que se ven trabajadores entre ciertas falsedades. Con el amor a su tierra, con la razón por delante, si perdieran esta guerra sería siempre humillante. Algunas tierras perdidas, otras con daños fatales, sus gentes siguen erguidas en momentos especiales. Son parecidas llanuras, con sus brisas y sus aires, las guerras dejan locuras envueltas entre desaires. La Mancha ve reflejada sus llanuras bajo el fuego, Ucrania sigue dañada aunque vivamos su ruego. G X Cantalapiedra.