Fuí hijo de Guardia Civil, estuvimos en Adanero cuatro años , de los cuales tres tuve la suerte de ir con deªPepita, ella marcó los cimientos de lo que ahora soy, nada de conejos y pollos apenas teníamos para comer. Yo siempre he pensado que igual que un maestro debe aprovechar las cualidades del alumno, este debe ser avispado e intentar amoldarse a su maestro para sacarle todo lo bueno que tiene , si no se hace, cada uno corra con su resposabilidad, yo así lo hice y esta buena mujer me llenó de amor por el estudio, hasta tal punto que ahora soy cirujano en un pequeño Hospital de Alcalá de Henares y en el Historial de mi Tésis Doctoral figura una pequeña reseña como uno de los principales pilares de lo que yo soy.Mi más sincero y cariñoso reconocimiento a esta estupenda mujer que se atravesó en mi camino. Un saludo a todos.