También había dos colchoneros: Tío Colchonero y tío Ladis. Un fuerte abrazo
Con la llegada del buen tiempo era habitual ver a la puerta de alguna casa a personas vareando la lana de los colchones. Con el tiempo, la lana de los colchones se apelmazaba, había que deshacerlos, sacar la lana y varearla para que esponjara, lo hacían los colchoneros del pueblo, algún otro que venía de fuera o los hombres y mujeres de la casa. Barrían parte de la fachada, se ponían unas mantas en el suelo y con una vara de punta fina, me parece que era de fresno, se pasaban el día dando varazos a la lana hasta que se quedaba como una espuma. Yo probé de hacerlo y no era fácil, tenía su técnica y saber hacer. Un fuerte abrazo