ADANERO: De lo del toro del Tío Ranero si que me acuerdo bien,...

No se si te acordarás que uno de los toros del Tio Ranero quedó fulminado al pisar un cable de la luz a la salida de la boyería. Un fuerte abrazo.

De lo del toro del Tío Ranero si que me acuerdo bien, pero creo que fue una "chispa" que lo fulminó. A primera hora de la tarde de ese día se montó una tormenta, con aparato eléctrico, de esas que empezaba a ponerse negro, pero negro, por el telégrafo y el ventorro (esas eran las peligrosas) y acabó descargando agua a raudales, relámpagos y truenos para dar y regalar, que a los que nos daban miedo ya no sabíamos donde meternos. Yo estaba en casa del abuelo de Javier, se oyó un chasquido y a continuación un olor (nunca mejor dicho) a cuerno quemado, sacamos la cabeza por detrás de la cortina y allí estaba el buey " patas arriba". Las tormentas, de pequeño me daban mucho miedo y de mayor,..... pues también, aunque mas controlado. Un día de verano, volviendo del puente de madera del río, al salir del pinar y a mitad de la pradera descargo otra de las que hacían época. Nos había dejado el burro Tío Cesáreo (el marido de Dª Enedina), le dimos palos para para que se alejara y nos tumbamos en el suelo, nos cayo el Diluvio Universal encima y al burro tanto lo espantamos que se volvió solito a casa. Ni que decir tiene que al llegar a casa nos esperaba otro "chaparrón". Seguiremos recordando las escapadas al río, tanto en familia como en pandilla. Un fuerte abrazo.