Plaza del Arrabal de
Arévalo.
Casas de no más de tres alturas de bellos
balcones, curiosos remates ornamentales y alguna que otra buena labor de forja. Y eso sí, siempre con
soportales en todo el perímetro de este irregular y amorfo espacio urbano. Si empleamos las etiquetas "irregular" y "amorfo" no es por otro motivo que porque no sigue los cánones más "tradicionales" de plaza.