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ARÉVALO Y SUS CEREALES
Tierra grande de Castilla
donde reinan los cereales,
tiene Arévalo semilla
de cosechas naturales.
Entre dos ríos pequeños
que fueron gran fortaleza,
Arévalo puso empeños
de constancia y de nobleza.
Siete iglesias son testigos
de su llano castellano,
Arévalo tiene siglos
entre judío y cristiano.
Se nota latir su historia
en estos bellos lugares,
el ayer dejo memoria
de sus guerras y cantares.
Arévalo de pasada
tiene un sufrido Castillo,
fue la ciudad evocada
que siempre tuvo un gran brillo.
El río Adaja la adorna
con sus pinos y alamedas,
es paisaje que soborna
en las dulces primaveras.
Arévalo castellana
cuna de trigos famosos,
en sus trabajos se afana
al ver sus campos gozosos.
Estos campos castellanos
que ayer tuvieron grandeza,
son caminos siempre sanos
con dignidad y nobleza.
Pisar sus calles sin prisa
es conocer sus linajes,
Arévalo tiene brisa
de cultura con paisajes.
G X Cantalapiedra.
Tierra grande de Castilla
donde reinan los cereales,
tiene Arévalo semilla
de cosechas naturales.
Entre dos ríos pequeños
que fueron gran fortaleza,
Arévalo puso empeños
de constancia y de nobleza.
Siete iglesias son testigos
de su llano castellano,
Arévalo tiene siglos
entre judío y cristiano.
Se nota latir su historia
en estos bellos lugares,
el ayer dejo memoria
de sus guerras y cantares.
Arévalo de pasada
tiene un sufrido Castillo,
fue la ciudad evocada
que siempre tuvo un gran brillo.
El río Adaja la adorna
con sus pinos y alamedas,
es paisaje que soborna
en las dulces primaveras.
Arévalo castellana
cuna de trigos famosos,
en sus trabajos se afana
al ver sus campos gozosos.
Estos campos castellanos
que ayer tuvieron grandeza,
son caminos siempre sanos
con dignidad y nobleza.
Pisar sus calles sin prisa
es conocer sus linajes,
Arévalo tiene brisa
de cultura con paisajes.
G X Cantalapiedra.