13 mayo 2012
Hace prácticamente casi un año que escribí las pequeñas notas que hoy día 12 de mayo del presente año, recibo una magnifica contestación sobre Aveinte. Debo comentar que en el citado cuartelillo yo también viví, o mejor dicho, pase unas vacaciones de verano el año 1943, ya que uno de los números de que se componía la fuerza, era tío mío llamado Antonio y que parece ser era conocido por su carácter alegre y de muy buena persona, según otro guardia civil que conocí ya jubilado y realizando labores de ordenanza en una empresa pública dependiente del Ministerio de O. P. en Madrid. Debo decir que en el citado pueblo existía una familia de la cual uno de sus miembros llega a ser Director del Psiquiátrico de Ávila, llamado Doctor Peña, como sé vera, y si profundizásemos podría escribirse pequeñas historias de personajes relacionados con Aveinte y que llegaron a situaciones sociales muy estimables.
Un saludo muy afectuoso
Hace prácticamente casi un año que escribí las pequeñas notas que hoy día 12 de mayo del presente año, recibo una magnifica contestación sobre Aveinte. Debo comentar que en el citado cuartelillo yo también viví, o mejor dicho, pase unas vacaciones de verano el año 1943, ya que uno de los números de que se componía la fuerza, era tío mío llamado Antonio y que parece ser era conocido por su carácter alegre y de muy buena persona, según otro guardia civil que conocí ya jubilado y realizando labores de ordenanza en una empresa pública dependiente del Ministerio de O. P. en Madrid. Debo decir que en el citado pueblo existía una familia de la cual uno de sus miembros llega a ser Director del Psiquiátrico de Ávila, llamado Doctor Peña, como sé vera, y si profundizásemos podría escribirse pequeñas historias de personajes relacionados con Aveinte y que llegaron a situaciones sociales muy estimables.
Un saludo muy afectuoso
Cuando viviamos allí era el año 1948. Recuerdo también un rio que había cerca del Cuartel. Me compraron mis padres unos zapatos en El Gorila, Plaza del Callao de Madrid y no me gustaron nada; no me los quería poner porque decia que me "apretaban", entonces mi padre me daba un paseo todos los dias hasta el puente que habia sobre el rio, para que el pié "se adaptara"........ pero nunca llegué a usar los zapatos!