Ahora soy Jacinto, no sé nada de ti desde que vas por el taller, debe ser que te has hecho rico y no quieres saber nada de los pobres. Me dijeron que habías estado malo ¿fue importante? Espero que no lo fuera. Veo que te manejas bien con las nuevas tecnologías, yo en cambio tengo a mi hija aquí para que me ayude a llevar esto. Bueno, si quieres mándame un número de teléfono al correo de mi hija para ponerme en contacto contigo que por aquí no vamos a contarnos la vida. Un saludo y hablamos pronto.