Me ha sorprendido la muerte de Marciana, no esperaba que se fuera tan pronto, pero si su calidad de vida no era la que se merecía, bién ha hecho Dios en llevarsela. La recuerdo grande, fuerte, luchadora, ayudando y aconsejando bien a todos. ¿Que ha sido de todos aquellos a los que crió como sus hijos, se han vuelto olvidadizos y desagradecidos? Que la vida les juzgue. Que su familia reciba mis condolencias más sinceras, en tan luctuoso evento.
En la medida que juzgues, serás juzgado
DEP
DEP