En el
altar mayor nos encontramos con la verja central, realizada en forja, incluido el
Cristo que la corona. Se divide en dos cuerpos y tres
calles, con barrotes retorcidos que incluyen dibujos góticos de rombos y cuatrifolios, y rematada por una crestería de chapa repujada. Fue fabricada en el primer tercio del siglo XVI. Las
rejas de las naves laterales también son de la misma época, realizadas en estilo
gótico. Ambas tienen inscripciones que nos hablan de sus autores: la de la derecha, realizada en
Toledo, obra de Juan de Osorno; forjada por Lorencio, en
Ávila, la del lado izquierdo. La
reja de la
capilla del inquisidor es
gótica y está rematada por
arcos conopiales, colocada en el siglo XVI.