Me cuesta creer que la “acequia” que aparece en la foto sea el amazónico, por lo caudaloso que era, sobre todo en invierno y primavera, río Arevalillo.
A parte de que no consigo averiguar el paraje de la foto, me parece que el río está manipulado.
Por derecho natural, todo lo que nace crece, aumenta, se expande, y sin embargo ¿qué ha pasado con el río Arevalillo? Es como si le hubiera ocurrido todo lo contrario, se ha empequeñecido ha quedado como... Reducido a un regato.
Cuando yo era pequeño el río Arevalillo me parecía que tenía una anchura casi como la del Ebro y caudal no voy a decir tanto pero de pequeños en alguna ocasión casi estuvimos a punto de fabricarnos una barca para poder cruzarlo y arribar de una orilla a la otra.
¡Qué exagerado! Dirá alguien que soy, pero aunque sea un recuerdo un poco aumentado, era así como lo retenía en mi memoria.
Durante toda la época de lluvia era un río torrencial, caudaloso y rápido, mucho más que el de Aldeamuña. Estaba más cerca de los montes de la Sierra y el agua todavía bajaba con fuerza y nervio, en cambio el de Aldeamuña a su paso por Horcajuelo ya había hecho un recorrido más largo y las aguas venían más lentas.
De todos modos, seguro que siempre habrá sido como en la foto, pero es que cuando somos pequeños en tiempo y dimensión, las cosas, y aún más los elementos naturales nos parecen enormes, y sobre todo en el recuerdo.
Besos y abrazos para todos y Felices Fiestas.
A parte de que no consigo averiguar el paraje de la foto, me parece que el río está manipulado.
Por derecho natural, todo lo que nace crece, aumenta, se expande, y sin embargo ¿qué ha pasado con el río Arevalillo? Es como si le hubiera ocurrido todo lo contrario, se ha empequeñecido ha quedado como... Reducido a un regato.
Cuando yo era pequeño el río Arevalillo me parecía que tenía una anchura casi como la del Ebro y caudal no voy a decir tanto pero de pequeños en alguna ocasión casi estuvimos a punto de fabricarnos una barca para poder cruzarlo y arribar de una orilla a la otra.
¡Qué exagerado! Dirá alguien que soy, pero aunque sea un recuerdo un poco aumentado, era así como lo retenía en mi memoria.
Durante toda la época de lluvia era un río torrencial, caudaloso y rápido, mucho más que el de Aldeamuña. Estaba más cerca de los montes de la Sierra y el agua todavía bajaba con fuerza y nervio, en cambio el de Aldeamuña a su paso por Horcajuelo ya había hecho un recorrido más largo y las aguas venían más lentas.
De todos modos, seguro que siempre habrá sido como en la foto, pero es que cuando somos pequeños en tiempo y dimensión, las cosas, y aún más los elementos naturales nos parecen enormes, y sobre todo en el recuerdo.
Besos y abrazos para todos y Felices Fiestas.