LA COLILLA: Las canteras de piedra de La Colilla ...

Las canteras de piedra de La Colilla
De gran importancia económica en otros tiempos
Familias que Vivían malamente con lo que sacaban de la extracción de piedra para el adoquinado de las calles de las ciudades más importantes.
Solo existían unos cuantos especializados en la fabricación de los adoquines, recuerdo me pasaba horas en mi infancia viendo como de una gran pieza de piedra, le iban partiendo en mitades hasta conseguir el tamaño adecuado para que las piezas dieran la justa medida exigida para el adoquinado
La parte que mas me gustaba era la última cuando hacían una raya por una de las caras de la piedra a base de cincel simplemente marcando con un golpecito precisos y zas con el mazo por la otra cara y salía el corte totalmente recto, luego cuatro golpecitos en las aristas y listo el adoquín.
Aun recuerdo el olorcito que desprendía la cesta de la comida cuando las madres o esposas les llevaban a la hora del medio día para perder el menor tiempo posible y continuar con el monótono y duro trabajo
A veces la mayoría la comida consistía en ese cocido de garbanzos hecho en el puchero a fuego lento en la lumbre baja, que con un simple hueso de jamón y un buen trozo de tocino y al final de la cocción se le agregaba un relleno que consistía en echar un huevo batirlo con pan migado enrollado después se pasaba por la sartén y este rollito llamado relleno le daba el toque final, aquello sabia a gloria, con su sopa de pan candeal de hogaza cortado en finas laminas era el primer plato y de segundo los garbanzos, al final se ponía el tocino en un trozo de pan con el trozo correspondiente del relleno para el remate final
Y así era el sustento de aquellos rudos y aguerridos trabajadores artistas anónimos fabricantes de los adoquines de las calles de nuestras ciudades