Me parece estupendo que un pueblo tan pequeño tenga una obra de teatro que se sitúe y reciba precisamente su nombre, "La hija de Dios". Es una pieza que José Bergamín publicó en México en 1945 con ilustraciones de Picasso. Transcurre en verano de 1936 y trata sobre la guerra civil. Si puedo, enviaré foto de la portada.