En esta pequeña
Iglesia, de
arquitectura rural,
pueblo de agricultores y ganaderos en su totalidad, han sido bautizados niños y niñas que después de mayores fueron profesionales muy diversos. Hay ingenieros, médicos, veterinarios, farmaceuticos, abogados, físicos, matemáticos,
biologos, maestros, sacerdotes, monjas y alguno que se me olvidará. Además tenemos un campeón mundial de arada y manejo del tractor. Hoy, algunos, tristemente, solo les podemos recordar.