Así eran las
nevadas de nuestra infancia. Tras una copiosa
nevada, se podía mantener el suelo cubierto de
nieve durante 15 días. Esa nieve se derretía lentamente y se iba filtrando en el suelo. Los beneficios que traían esta nevadas eran múltiples: se llenaban los acuíferos, la
primavera era generosa, se curaban las matanzas... Año de nieves, año de bienes.