Dios Mío...
Ayúdame a decir la palabra de verdad en la cara de los fuertes, y a no mentir para congraciarme del aplauso de los débiles.
Si me das dinero no me tomes mí felicidad, y si me das fuerzas, no quites mi raciocinio.
Si me das éxito, no me quites la humildad, si me das humildad, no me quites mi dignidad.
Ayúdame a conocer la otra cara de la imagen, y no me dejes acusar a mis adversarios, tachándolos de traidores por que no comparten mi criterio.
Enseñame...