Una paloma volaba dificultosamente a causa del mucho viento que se le enfrentaba.
En medio de este esfuerzo se le apareció la Gran Paloma y le dijo:
- ¿Qué quieres que haga por ti?
-Señora, -dijo la paloma- quita el viento para que pueda volar sin dificultad.
Y así fue. Desapareció el viento y la paloma se precipitó violentamente hasta chocar estrepitosamente contra el suelo.
Así como el viento, aunque adverso, hace posible el vuelo de la paloma, así también las dificultades permiten y favorecen nuestro vuelo hacia la perfección.
En medio de este esfuerzo se le apareció la Gran Paloma y le dijo:
- ¿Qué quieres que haga por ti?
-Señora, -dijo la paloma- quita el viento para que pueda volar sin dificultad.
Y así fue. Desapareció el viento y la paloma se precipitó violentamente hasta chocar estrepitosamente contra el suelo.
Así como el viento, aunque adverso, hace posible el vuelo de la paloma, así también las dificultades permiten y favorecen nuestro vuelo hacia la perfección.