POEMA ABROJOS DE ANTONIO
PLAZA
Siempre desgraciado fui;
Desde mi pequeña cuna,
A la incansable fortuna
de juguete le serví;
La
noche en que yo nací
Tronaba la tempestad,
Y alaridos de ansiedad
La gente aturdida alzaba;
Porque el cólera sembraba
El terror y la orfandad.