RASUEROS: Buenos días, Fraililla: ...

Buenos días, Fraililla:
Gracias por tus amables palabras y por tu agradecimiento. Dicen que el agradecimiento es como el perfume de la memoria del corazón. Créeme: mientras escribía el libro pensaba sobre todo en las personas que como tú viven lejos de la tierra que les vio nacer y me preguntaba si acaso mi escrito podía hacerles llegar un rayo de la luz de su infancia o ciertos olores o colores de juventud. Todos los pueblos, como todas las personas, tienen su propia historia, y la gran historia que leemos en los libros no sería posible sin esa pequeña historia que cada pueblo o cada cual tiene a sus espaldas. En una cosa no estoy de acuerdo contigo: sí que hay mucho más que contar de Rasueros, y ojalá lo que yo he escrito sirva para que otros se animen y lo cuenten. Perdona que no siga porque soy hombre de pocas palabras. En pie queda lo de la cerveza para este verano, aunque ya sé que nos conocemos. Muchas gracias otra vez.
A la otra persona que escribe aquí y se interesaba por el libro (creo que se llama Meche) le digo que a partir del día de los Santos podrá recoger un ejemplar en casa de mi suegra en Rasueros.