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RASUEROS: Y yo también me iré;...

Y yo también me iré;
me iré en las sombras alargadas, tenues,
del tibio atardecer,
a las cumbres de inmaculada nieve.
Con leve parpadeo,
en la magia sonora de los robles,
se quedaran mis sueños,
vagabundos fantasmas de la noche.

Las figuras confusas,
los mutables colores y los ruidos
dejarán su envoltura,
del ocaso, en los últimos suspiros.

Y escalaré la cima,
en las lánguidas alas del otoño,
en la tarde amarilla,
con vuelo soñoliento, silencioso.

Y veré la alborada,
sin ecos, sin imagénes, sin dudas,
de la luz increada,
y las esencias nítidas, desnudas. (Abilio del Castillo)

Porque el dolor de la pérdida de una madre es muy difícil de atenuar y un poco de nuestro yo se nos vá para siempre. Pero la naturaleza es sabia, y poco a poco, con el paso del tiempo, quedan los recuerdos y el alma se serena. Eso te deseo a ti amiga P. Martin Loa, yo pediré en especial por el alma de tu madre, nuestra"Sra Ignacia", que desde allá arriba por un agujerito, siga contemplando su querido pueblo de Rasueros, y tu la sigas recordando con la serenidad y paz que dá el comprender que la vida termina en el momento que uno está preparado para partir.
Descanse en paz nuestra querida "paisana"Ignacia.
Bss para tiP. Martin Loa,! Animo ¡... Ignacio
Respuestas ya existentes para el anterior mensaje:
Buenos días.
Casualmente, ha saltado hoy en mi pantalla este bello poema y este sentido comentario que eleva nuestras almas en busca de la paz y la serenidad perdidas.
Pero... que difícil resulta, ante situaciones tan duras que nos impone la vida, no cuestionarse esta.
Cuanta rabia e impotencia... sin respuesta!
Querida P. Martín Loa, el dolor ha querido que nos conozcamos a través de este foro y que podamos compartir incluso nuestros amargos silencios. Espero que, ya que ha pasado un poquito ... (ver texto completo)