Buenos días a todos... y ya casi feliz fin de semana!
Es muy temprano pero he visto esta foto y es que es inevitable que se te haga la boca agua.
Creo recordar que los productos resultantes de las "matanzas" se subían a los "sobraos" para que se curasen.
En casa de mis abuelos había uno, al que subía, a veces, no sin cierto temor... por lo que pudiese encontrar!... Películas de mentes infantiles.
Recuerdo también que todos los años mi padre encargaba, de un año para otro, en un pueblo cercano cuyo nombre ahora mismo escapa a mi memoria -Aunque pudiera ser Rágama-, un par de jamones "ricos", "ricos", que nos bajábamos para casa.
Como los jamones de su tierra ningunos! Y mira que están buenos los de Jabugo de pata negra... pues nada!, En aquella época creo que aún no existía la denominación de Guijuelo, aunque no estoy segura.
Recuerdo también que nos atendía una señora, aparentemente viejecita, toda vestida de negro a la que solo se le veían las manos y una carita redonda y arrugada.
Y digo aparentemente porque creo que la edad se la confería su atuendo, ya que todos los años estaba igual.
Bueno, voy a ir haciendo boca para la hora del desayuno que hoy creo que adelantaré un poquito.
Un abrazo para todos. LOLA.
Es muy temprano pero he visto esta foto y es que es inevitable que se te haga la boca agua.
Creo recordar que los productos resultantes de las "matanzas" se subían a los "sobraos" para que se curasen.
En casa de mis abuelos había uno, al que subía, a veces, no sin cierto temor... por lo que pudiese encontrar!... Películas de mentes infantiles.
Recuerdo también que todos los años mi padre encargaba, de un año para otro, en un pueblo cercano cuyo nombre ahora mismo escapa a mi memoria -Aunque pudiera ser Rágama-, un par de jamones "ricos", "ricos", que nos bajábamos para casa.
Como los jamones de su tierra ningunos! Y mira que están buenos los de Jabugo de pata negra... pues nada!, En aquella época creo que aún no existía la denominación de Guijuelo, aunque no estoy segura.
Recuerdo también que nos atendía una señora, aparentemente viejecita, toda vestida de negro a la que solo se le veían las manos y una carita redonda y arrugada.
Y digo aparentemente porque creo que la edad se la confería su atuendo, ya que todos los años estaba igual.
Bueno, voy a ir haciendo boca para la hora del desayuno que hoy creo que adelantaré un poquito.
Un abrazo para todos. LOLA.