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¡Venga a Nosotros tu Reino!, es lo que podemos leer en la plaquita que aquí vemos y que en muchas puertas de España lucía una de ellas, indistintamente a la comunidad que perteneciera.
Amparo, efectivamente, en los corrales se tenían animales, jardines, huertos, y todo lo que cupiera, si bien, según se iban adquiriendo o alquilando tierras los animales y el huerto iban saliendo de los corrales y éste quedaba como de patio o jardín e incluso se llegaba a edificar en los mismos para ampliar la casa, al menos así ocurrió en la mía.
Todos los pueblos, o casi todos, cambian amiga Amparo, la mayoría para mejor, aunque algunos no es que no crezcan, sino que desaparecen por la emigración de sus habitantes y fallecimiento de sus mayores.
Todo lo que sea prosperar en las poblaciones es bueno para todos, si el pueblo crece, la agricultura y ganadería crece los pueblos se mantienen o también crecen, es una alegría para mí ver, cuando voy de vacaciones a mi pueblo, como éste está repleto de casas nuevas, va consiguiendo más comodidades y todo el pueblo va viviendo, claro está que no todos sus habitantes podrán decir lo mismo, pues cada uno cuenta las cosas como les va, pero la mayoría va trabajando sin mayor problema.
Seguro Amparo que cuando pongas los pies en el suelo del pueblo que te vio nacer, lo recorres sin ningún problema reconociendo cada rincón y podrás decir, eso es nuevo, aquí había tal o cual, solo es respirar su aroma y ello te irá poniendo casa cosa en su sitio.
Efectívamente Charo, la rosa puede parecer mustia, y parezca tonta, pero tal vez como la reflexión que amparo pone en ella, tenga un gran y hermoso corazón que nadie ve.
Hacía unos días que faltaba,
Y no hay excusa que dar,
Aunque los texto miraba,
Escritos no llegué a dejar,
O tal vez si los dejaba,
Y no quisieron asomar,
Pero que más da o daba,
Si Amparo nos deja a todos atrás.
Abrazos pa tos y toas, El Emigrao
Amparo, efectivamente, en los corrales se tenían animales, jardines, huertos, y todo lo que cupiera, si bien, según se iban adquiriendo o alquilando tierras los animales y el huerto iban saliendo de los corrales y éste quedaba como de patio o jardín e incluso se llegaba a edificar en los mismos para ampliar la casa, al menos así ocurrió en la mía.
Todos los pueblos, o casi todos, cambian amiga Amparo, la mayoría para mejor, aunque algunos no es que no crezcan, sino que desaparecen por la emigración de sus habitantes y fallecimiento de sus mayores.
Todo lo que sea prosperar en las poblaciones es bueno para todos, si el pueblo crece, la agricultura y ganadería crece los pueblos se mantienen o también crecen, es una alegría para mí ver, cuando voy de vacaciones a mi pueblo, como éste está repleto de casas nuevas, va consiguiendo más comodidades y todo el pueblo va viviendo, claro está que no todos sus habitantes podrán decir lo mismo, pues cada uno cuenta las cosas como les va, pero la mayoría va trabajando sin mayor problema.
Seguro Amparo que cuando pongas los pies en el suelo del pueblo que te vio nacer, lo recorres sin ningún problema reconociendo cada rincón y podrás decir, eso es nuevo, aquí había tal o cual, solo es respirar su aroma y ello te irá poniendo casa cosa en su sitio.
Efectívamente Charo, la rosa puede parecer mustia, y parezca tonta, pero tal vez como la reflexión que amparo pone en ella, tenga un gran y hermoso corazón que nadie ve.
Hacía unos días que faltaba,
Y no hay excusa que dar,
Aunque los texto miraba,
Escritos no llegué a dejar,
O tal vez si los dejaba,
Y no quisieron asomar,
Pero que más da o daba,
Si Amparo nos deja a todos atrás.
Abrazos pa tos y toas, El Emigrao