Si ya te lo decia tu madre, y encima cabreada, que te ponia el Mª por delante, pero tú nada, de cabeza al barranco. Es que mira que eres ignorante. En este puente siendo yo pequeña y estando jugando, me empujaron sin querer y caí de espaldas. Aún recuerdo las heridas que me hice, porque entoncer estaba todo con piedras picudas. Menudos recuerdos. En este corral está la casa de mis padres, en ella he nacido yo y he vivido unos años, unos de los mejores de mi infancia. Cuando estaba allí no lo aptreciaba, pero al venirme a Madrid supe lo que era perder la libertad del pueblo.